Barcelona
El residencial de lujo vive un buen momento en España y se consolida como un valor refugio para la inversión en el conjunto de la Unión Europea. En el primer semestre de 2024, la oferta de viviendas de más de 2,5 millones de euros creció un 7%, hasta alcanzar un stock de 14.060 propiedades, según datos del último informe sobre el mercado inmobiliario elaborado por Lucas Fox.
Este aumento contrasta con la disminución del 12% de la oferta global del sector inmobiliario a nivel nacional. Pese a ello, la demanda de obra nueva se ha mantenido sólida en 2024, con unas ventas entre enero y septiembre que alcanzaron los niveles máximos de la década, es decir, con un incremento del 24% en comparación con la media de los últimos diez años. Sin embargo, la construcción se ha desplomado hasta casi el nivel más bajo de la década, con una caída del 53% interanual. Estos datos ponen de manifiesto, según la compañía, el desajuste entre las necesidades de la población y la capacidad del mercado para suplir la demanda habitacional.
Un dato alentador viene dado por el gran apetito extranjero, que ha aumentado significativamente tras la pandemia del Covid. Durante los nueve primeros meses del año, 64.735 ventas de viviendas en España las firmaron compradores que procedían del exterior, el segundo nivel más alto registrado. Esto supone un incremento del 1% en comparación con el mismo periodo del año anterior y un alza del 28% respecto a la media de la década.
Asimismo, la cuota de mercado de los compradores internacionales fue del 19%, un punto por debajo del año anterior. En el segundo trimestre, las transacciones cerradas por extranjeros aumentaron un 5%, por lo que el crecimiento se ha acelerado a medida que el año ha ido avanzando.
EEUU, en cabeza
Este interés también se percibe en el segmento de alto nivel. Según el estudio de Lucas Fox, los compradores internacionales representan el 66,9%, mientras que los nacionales se quedan en el 33,1%. Destacan en primer lugar los clientes de EEUU, que representan un 10,4% y se mantiene en cabeza, seguidos de los de Países Bajos, Reino Unido y Francia, con un 8,2%, 7,9% y 6,6%, respectivamente.
¿Qué atrae a los estadounidenses? "Sabemos que tenemos como reclamos el clima, la gastronomía... pero también somos un sitio muy seguro si nos comparamos con ellos. Además de más barato. Para residir en la mayoría de grandes ciudades de EEUU tienes que ganar unos 250.000 euros al año. Aquí, el coste de la vida es menor y muchos conservan el sueldo americano", explica Alexander Vaughan, cofundador de Lucas Fox.
En resumen, los compradores de residencias prime se reparten a partes iguales entre aquellos que buscan una inversión rentable y aquellos que desean formar un nuevo hogar ya sea por trabajo o buscando una mayor calidad de vida. También han despegado en los últimos años los estudiantes de intercambio, seducidos por el posicionamiento de las universidades y escuelas de negocios nacionales.
"Desde hace cinco o seis años, cada vez hay más gente que quiere poner parte de su dinero en real estate, y España cada vez ocupa más el listado de países donde la gente quiere invertir su capital. Lo vemos en el caso de Latinoamérica, donde debido a los cambios políticos la gente viene hasta aquí no solo para disfrutar sino también en busca de más seguridad", reflexiona Stijn Teeuwen, también cofundador de la compañía.
Ubicaciones más dinámicas
Por otro lado, el informe detalla que la oferta de inmuebles de lujo está altamente concentrada en algunas regiones. De esta manera, Málaga concentra un 30% del mercado prime a la venta; Mallorca, un 27%; Madrid, un 9%; Barcelona, un 7%; Alicante, un 7%; Ibiza, un 6%; Girona, un 4%; Cádiz, un 2%; Tenerife, un 2%; y Menorca, un 1%.
Es más: el residencial de lujo representa ya el 10% de la oferta total en Málaga; el 18% de la oferta de Mallorca; y el 32% de la oferta de Ibiza. En el caso de la capital meridional, estos datos se explican, fundamentalmente, por la mayor disponibilidad de suelo, una situación que también experimenta Madrid en comparación con Barcelona.
En lo que respecta a las operaciones de Lucas Fox, en el primer semestre la compañía concentró un 37,5% de transacciones en la Costa Brava, un 12,5%, en Barcelona, un 12,5%, en Garraf, un 12,5%, en Ibiza, y la misma cifra se alcanzó en Madrid, mientras que Alicante concentró un 6,3% y en Andorra también se cerraron el 6,3% restante de transacciones, pese a que el mercado en el enclave pirenaico registró menos movimiento.
Falta de producto nuevo
En el caso de Barcelona, las ventas han crecido un 6% en el primer semestre, impulsadas tanto por la demanda local como por la extranjera; esta última ha escalado hasta el 17%. El problema de la Ciudad Condal es la "falta de producto nuevo". "Esta situación hace que crezcan los precios muy rápido y muy por encima de lo que veníamos teniendo el año pasado. Esto se debe a la falta de obra nueva y la falta de suelo finalista. También influyen los elevados costes de construcción, que han crecido un 30% respecto a 2019. Ahora mismo no tenemos todas las unidades disponibles para la demanda que recibimos del mercado", resume Victoria González, listing manager de Barcelona en el grupo.
Pese a esta situación, que no solo se reduce a la capital catalana, "vemos con optimismo el impulso continuo del mercado, que no muestra signos de desaceleración". "En definitiva, esperamos un incremento significativo en las ventas de viviendas de lujo en 2025", concluye Stijn Teeuwen.
