
La resaca del nuevo recorte de tipos del BCE propicia la quinta caída diaria consecutiva del euríbor, que se sitúa sobre el 2,7%, muy cerca de mínimos anuales. La presidenta se guardó de no ofrecer ninguna pista sobre los futuros movimientos, pero el mercado, los expertos y el propio euríbor están convencidos de que los descensos sobre los tipos no se frenarán en los próximos meses. Por lo menos hasta el verano ven claro que el BCE irá recorte por reunión. Buena noticia para las hipotecas. Pero también es cierto que ya vislumbran el fin de las caídas.
La gran pregunta sobre el euríbor está muy clara. ¿Dónde y cuándo frenará su caída? Y las cosas empiezan a despejarse. El índice de las hipotecas está esposado a los tipos oficiales del BCE. Ahora mismo hay alrededor de 50 puntos básicos de diferencial entre el euríbor y la tasa de depósitos, que sufrió ayer un recorte al 3,25%. La referencia hipotecaria está funcionando como un indicador adelantado de los movimientos del BCE, pero al final sus destinos estarán fundidos al final del ciclo de recortes.
El suelo de los recortes de tipos y, por extensión del euríbor, ya tiene fecha fijada, incluso los niveles dónde pueden aterrizar. Muchos analistas y el mercado y los futuros del euríbor, en estos momentos, ven el final del ciclo para finales de 2025 y con un grado elevado de coincidencia. Algo que en el último año no había pasado.
Desde finales de 2023, el mercado venía descontando una salvajada de recortes por parte de los bancos centrales. Nadie los veía. Ni los propios bancos centrales, ni los expertos por la excelente salud económica. Pero la economía está empezando a fallar. Más en concreto, el empleo. Y ahora sí hay un alineamiento para el gran recorte de tipos de interés de los bancos centrales, y en especial, del BCE.
Lagarde se volvió a vestir de arcano, pero hubo varios detalles para atornillar las expectativas de los tipos por debajo del 2%. El recorte de ayer estaba cantado desde hacía semanas, pero en septiembre el mensaje del BCE era de pausa, con lo que la evolución ha hecho que la institución cambie el paso. Y otro es que al BCE le cuesta mover los tipos sin contar con previsiones de crecimiento e inflación. Ayer no tocaba, las perspectivas no se publican hasta final de septiembre.
Los expertos y operadores se fijan en el modelo OIS de swaps financieros que reflejan las posiciones cubiertas de los inversores ante las oscilaciones de los tipos de interés. Es muy buen indicador porque se mueven alrededor de miles de millones de dólares sobre los movimientos del BCE y es muy seguido por analistas y los propios bancos centrales. El sistema anticipa un recorte por reunión hasta el verano, que debe llevar los tipos al 2% y añade que a final de 2025 un recorte adicional para que queden sobre el 1,75%.
Wall Street espera fuertes caídas en 2025
Lo más gracioso es que ahora son los analistas los que ven los tipos todavía en niveles más bajos que el mercado. Durante meses ha sido al revés. "La reunión del BCE de ayer marcó el comienzo de una era de flexibilización consecutiva, aunque Lagarde siguió describiendo el proceso como dependiente de los datos y reunión tras reunión. Ahora un ciclo de recortes rápidos es el consenso", comentan desde Bank of America, uno de los grandes bancos de inversión de Wall Street. La firma ve el suelo de los tipos en el 1,5%, a final de año.
No son los únicos. Otros bancos como Citi o ABN Amro también ven los tipos en este nivel. No obstante, el consenso recogido por Bloomberg sitúa los tipos al final de 2025 sobre el 2%. Las casas de análisis más agresivas son las que ven a la economía europea atascada y con problemas.
Para el euríbor supone un margen amplio de caída adicional para el próximo año. Los futuros del índice, otra forma que tienen los inversores de asegurar sus posiciones, apuntan también a un indicador por debajo del 2%. En concreto, los contratos a tres meses, con vencimiento en diciembre de 2025, cotizan en el 1,855%.
Séptimo mes de caída
El euríbor se dirige a cerrar este mes de octubre sobre el 2,75%. Las revisiones de las hipotecas se realizan con la media mensual. Será el séptimo mes de caídas consecutivas. Y propiciará el mayor recorte en las cuotas hipotecarias desde que el euríbor empezó a caer el año pasado.
Para verlo con un ejemplo, para una hipoteca de 140.000 euros a 30 años (360 meses), con un diferencial del 1% y tomando como referencia el mes de octubre del año 2023 (ya que la mayoría de hipotecas se revisan a 12 meses), cuando el euríbor cerró al 4,16%, la cuota mensual era de 765,30 euros.
Ahora, con la media provisional de octubre de 2024, que se sitúa en el 2,759%, la cuota hipotecaria de los propietarios que tengan revisión en septiembre bajará a los 617,62 euros, lo que significa que pagarán 147,68 euros menos que hace un año y se comenzarán a notar las primeras caídas en las cuotas mensuales de los hipotecados.