
Pamesa da un paso al frente para consolidarse como referente de un nuevo modelo energético en el sector industrial en Europa. El grupo cerámico castellonense invertirá 15 millones de euros en la "mayor instalación fotovoltaica de autoconsumo de Europa", sobre 70.000 metros cuadrados en los techos de sus centros logísticos, ubicados en Onda. Estará operativa en julio de este año.
La instalación, diseñada y construida por la empresa especializada IM2 Energía Solar, tendrá una potencia final de 13,24 Mw. Pamesa ha optado por la modalidad de autoconsumo sin vertido a la red eléctrica, lo cual implica que el 100% de la energía generada será consumida dentro de las instalaciones.
"Según las estimaciones de producción realizadas, esta instalación solar podrá cubrir la totalidad de las necesidades eléctricas de la planta industrial de Pamesa en los períodos diurnos de máxima irradiación solar y disminuirá radicalmente la dependencia energética de energía eléctrica convencional", destallan fuentes de la entidad.
La compañía detalla que se instalarán más de 40.000 paneles fotovoltaicos, que le permitirán "aprovechar uno de los recursos naturales más abundantes e infrautilizados de la región, el sol".
Además, la instalación fotovoltaica evitará la emisión a la atmósfera de 8.816 toneladas de CO2 y el consumo equivalente de 1,89 millones de litros de petróleo anuales.
"El desarrollo de este proyecto solar conseguirá que los productos producidos por Grupo Industrial Pamesa sean más sostenibles y ecológicos, continuando la política de bajo impacto ambiental que la empresa viene desarrollando a través de otras acciones realizadas, como la recuperación del calor de los hornos, el reciclaje de aguas residuales y testillo cerámico y la utilización de sistemas de cogeneración, que el grupo lleva realizando desde hace años", subraya la entidad.
Tras completar la integración y puesta en marcha de las instalaciones productivas de la antigua TAU, el Grupo Industrial Pamesa alcanzó en 2017 una facturación consolidada de 584 millones de euros, un 26% más que en 2016 -por encima del objetivo inicial, de 520 millones-. El volumen de ventas superó los 72 millones de metros cudrados. El objetivo para 2018 era superar los 630 millones de facturación.