
Ximo Puig ha asumido directamente la interlocución con los responsables de los organismos y programas de financiación europeos, para mejorar las relaciones y el flujo de fondos para inversiones en la Comunitat Valenciana, muy limitados en los últimos años. Puig ha mantenido sendas reuniones con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, en Estrasburgo, al que pidió mayor apoyo y financiación para la región, y con el vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones, Román Escolano (BEI), en Luxemburgo, para reforzar la actividad crediticia con pymes a través del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) -tras su rediseño como banco público-.
Puig abogó, asimismo, por reducir la burocratización en la aplicación del Plan Juncker, para impulsar medidas que tengan mayor impacto en las pymes, y pidió una redefinición del planteamiento de cofinanciación de proyectos. "Queremos que las cifras se ajusten a la nueva realidad en lo que queda de plan operativo, pero sobre todo de cara al plan 2020-2026", indicó.
Por su parte, Escolano planteó otras posibles vías de colaboración, como apoyos a empresas agrarias y ganaderas, programa iniciado ya en Italia, así como a la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI), que se constituirá este año.
Puig aplaudió, asimismo, el apoyo al Corredor Mediterráneo ferroviario tanto por parte del BEI como de Juncker. "Se trata de una infraestructura que tiene grandes posibilidades de tener la acogida máxima del plan Juncker", aseguró.
El presidente valoró la "receptividad" con la que ha sido atendido: "Juncker entiende que Europa no se construye solo desde los Estados, sino también desde la diversidad de las regiones"."Necesitamos el apoyo de la UE para desarrollar todo nuestro potencial", subrayó.
"Reconciliación"
La relación de la Comunitat Valenciana con las instituciones europeas se ha visto afectada por situaciones como el déficit sanitario oculto, las ayudas ilegales a los clubes de fútbol o a Ciudad de la Luz y los incumplimientos en el plan de infraestructuras educativas, financiado al 50 por ciento por el BEI. "Hemos constatado que los conflictos los podemos superar, como pasó con el desencuentro por Ciudad de la Luz", afirmó Puig.
En esta línea, el presidente valenciano se comprometió a presentar, en septiembre, una reformulación del programa de instalaciones educativas al BEI, para que las 17 pendientes, algunas ya en "plena ejecución", estén finalizadas en 2018.
El jefe del Ejecutivo valenciano ha destacado que el encuentro ha servido para "situar a la Comunitat Valenciana en el mapa" y ha asegurado también que su objetivo es trabajar para mantener la buena relación con la Unión Europea y también por conseguir que se tenga en cuenta la situación económica de la Comunitat.
La reunión entre Puig y Juncker también giró alrededor del Brexit. El presidente valenciano ha recordado a este respecto que alrededor un tercio de los ingleses que viven en España lo hacen en la Comunitat Valenciana y se ha mostrado partidario de que impere el "sentido común" en el proceso de negociación.