La Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMV) ha impuesto multas por un importe total de 6,12 millones de euros a seis empresas fabricantes de turrón por repartirse el mercado de las principales empresas distribuidoras de marca blanca en España (Alcampo, Carrefour, Mercadona, El Corte Inglés, Eroski, Dia,...) y garantizarse sus cuotas de mercado. La sanción se dirige contra cinco empresas alicantinas, Almendra y Miel -fabricante de las marcas 1880 y El Lobo-, Enrique Garrigós Monerris, Turrones José Garrigós -La Jijonenca-, Sanchis Mira -cuya principal marca es Antiu Xixona- y Turrones Picó, y Delaviuda, con sede en Toledo. Estas compañías concentran el 58 por ciento del mercado del turrón.
La CNMC explica que la investigación se puso en marcha a raíz de una denuncia y que, en noviembre de 2013, realizó inspecciones en las sedes de cinco de los fabricantes: Delaviuda, Almendra y Miel, Sanchis Mira, Turrones Picó y Enrique Garrigós Monerris.
Competencia considera acreditado que, "entre abril de 2011 y noviembre de 2013, estas empresas se intercambiaron información estratégica sobre precios, clientes y otros datos comercialmente sensibles relativos al mercado de suministro de turrones, en particular de marca blanca o de distribuidor", tanto en reuniones presenciales como a través del teléfono y el correo electrónico. Asimismo, asegura que estos intercambios "se realizaron con el conocimiento de altos directivos y responsables de distintas áreas de negocio de los fabricantes".
Las mayores multas recaen sobre Sanchis Mira -interproveedor de Mercadona-, que centra casi la mitad del importe total, 2,94 millones de euros, y Delaviuda Alimentación, con 2,29 millones. En el caso de Almendra y Miel se cifra en 271.893 euros; en el de Turrones José Garrigós, 250.055 euros; en el de Picó, 249.289 euros, y en el de Enrique Garrigós, 127.415 euros.
Competencia apunta que "cualquier persona o empresa que se considere afectada por las prácticas anticompetitivas descritas en esta resolución, puede presentar una demanda de daños y perjuicios derivada de las citadas conductas por infracción de la normativa de defensa de la competencia ante los tribunales civiles".
Recursos de las afectadas
Las sancionadas pueden presentar un recurso contencioso-administrativo en la Audiencia Nacional.
Almendra y Miel y Sanchis Mira niegan haber incurrido en cualquier tipo de ilegalidad y han anunciado ya que recurrirán la sanción.
Almendra y Miel asegura que "siempre ha cumplido con la legalidad y desarrollado una estrategia comercial independiente", por lo que considera "totalmente injusta la resolución y la sanción impuesta desproporcionada, extremo que, al parecer, comparten dos de los cinco consejeros que han adoptado la resolución".
Por su parte, Sanchis Mira considera que las supuestas prácticas anticompetitivas de intercambio de información "no se han acreditado en su caso" y subraya "el cumplimiento de toda la normativa aplicable a la actividad de la empresa, incluido el derecho de la Competencia, es un principio fundamental e ineludible para la compañía".
La compañía ha comunicado que la resolución de la CNMC no afecta a su actividad diaria y que "todos los productos y actividades de la compañía continúan desarrollándose plenamente y con total normalidad. De este modo, la empresa garantiza a todos los clientes y consumidores de los productos de Sanchis Mira el compromiso de calidad y servicio a todos los niveles".