El grupo alemán Vossloh ha puesto a la venta su división de Transportes, que incluye la fábrica de locomotoras y trenes de Vossloh España en Albuixech (Valencia), que tiene una plantilla de más de 700 personas.
El anuncio se produce cuando la planta valenciana está en su mejor momento desde que Vossloh la adquirió en 2005 al grupo francés Alsthom, con una cartera de pedidos de más de 600 millones de euros en Israel, Brasil, Sudáfrica y varios países de Europa.
Sin embargo, la esta división de Transportes, que factura unos 500 millones -de un total de 1.340 millones del grupo- y de la que también forma parte la planta de Kiel (Alemania), ha dejado estar en el core business (actividad principal) del grupo, según la nueva estrategia aprobada por la central de Vossloh.
Según esta estrategia, la anterior división de Infraestructuras Ferroviarias se va a dividir en tres nuevas unidades de negocio Componentes Básicos, Módulos a Medida y Soluciones de Ciclo de Vida.
La de Transportes ya no formará parte del core business, aunque se mantendrá inicialmente como cuarta división del grupo, hasta que se venda "en su totalidad o en partes en 2017 como máximo o se transfiera a una sociedad que ya no será controlada por Vossloh, en función del progreso de reestructuración y reposicionamiento medidas de Vossloh Group está llevando a cabo", según un comunicado de la compañía.
Nuevo máximo accionista
El empresario alemán Heinz Thiele, propietario del grupo fabricante de frenos Knorr-Bremse, se convirtió en máximo accionista de la compañía a principios de 2014 y relevó a toda su cúpula ejecutiva el pasado 1 de abril. Poco después, en junio anunció que estaba trabajando en una importante reorganización para aumentar la rentabilidad.
Aunque la compañía alemana habla en su comunicado de que la filial de Transportes acabó 2013 en pérdidas, lo cierto es que los números rojos se debieron a los gastos extraordinarios de un proceso judicial. La división redujo sus ventas y beneficios ordinarios. En el caso de Vossloh España, las ventas fueron de 150,7 millones y el beneficio neto, de 6,36 millones. La previsión para 2014 era mejorar las ventas y los beneficios ordinarios.
El grupo Vossloh anunció este martes que espera acabar 2014 con unas ventas de alrededor de 1.340 millones y confirmó una previsión de resultado bruto de explotación (ebit) negativo de entre 150 y 180 millones, que atribuye a la reestructuración de la empresa, a la debilidad de la economía global y a la reducción del gasto público en infraestructuras ferroviarias en Alemania.
La filial española, que dirige Íñigo Parra, ha rehusado pronunciarse sobre este anuncio.