
Intermodalidad de Levante (Ilsa), el nuevo operador ferroviario de alta velocidad formado por la compañía italiana Trenitalia y los socios de Air Nostrum, se ha reunido con el alcalde de Valencia, Joan Ribó, para presentarle sus planes.
El CEO de la compañía, Fabrizio Favara, cifró en la reunión al menos 250 puestos de trabajos los que creará la empresa en Valencia, donde tendrá su sede. El directivo ha considerado la importancia del concepto de intermodalidad, "porque con Ilsa Valencia mantendrá conexiones con todos los sistemas de modalidad", es decir, con los diferentes métodos de transporte.
Ilsa ya ha publicado sus primeras ofertas de empleo. En concreto, una convocatoria de 100 plazas para maquinistas de alta velocidad. También tenía previsto poner en marcha en los próximos meses un nuevo proceso de selección para incorporar más de 500 personas de Asistencia a Clientes.
Según el proyecto presentado hoy al alcalde, la aportación directa de Ilsa en la Comunidad Valenciana será de 14,8 millones de euros de aportación en concepto de salarios y de impuestos autonómicos en 2025.
Además, con la puesta en marcha a partir de 2022 de sus trenes, prevé generar 244 millones de gasto turístico en al región, con un movimiento de 1,8 millones de viajeros, y 23 frecuencias diarias (16 entre València y Madrid).
Ilsa tiene previsto operará a partir de 2022 rutas que conectarán entre si Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga, Córdoba, Valencia, Alicante, Zaragoza y Cuenca.
En la reunión con el alcalde de Valencia también participó el presidente de Air Nostrum, Carlos Bertomeu, socio de referencia también de Ilsa. Los directivos de la nueva compañía ferroviaria privada, que competirá con Renfe y Ouigo en alta velocidad, también habían tenido un encuentro el lunes por la tarde con el presidente valenciano, Ximo Puig.