
El Ministerio de Transportes ha adjudicado las nueve áreas de servicio incluidas en la autopista AP7, que desde el pasado mes enero pasó a titularidad del Estado tras el final de la concesión a Aumar, filial de Abertis.
El ministerio que dirige José Luis Ábalos convocó para ello un concurso de servicios para otorgar la explotación de cada una de las áreas incluidas en la autopista de Tarragona a Alicante, con sus gasolineras y centros de restauración, durante un plazo de cinco años a cambio de un canon anual.
Un negocio que ha atraído a los principales operadores de estaciones de servicio de España, los grupos petrolíferos, y que ha tenido un claro ganador, el italiano Eni. La petrolera transalpina se ha hecho con cuatro de las nueve áreas de servicio.
En concreto, la empresa asumirá las de L'Hospitalet de l'Infant y Baix Ebre en Tarragona, la de La Ribera en Cabanes (Castellón) y la de Sagunto en Valencia. Eni acudió con Autogrill como operador especializado de los establecimientos de hostelería, marca que ya estaba presente en varios de esos centros.
Por su parte, Galp y Cepsa se han adjudicado dos áreas de servicio cada una. La portuguesa gestionar la de La Plana en Castellón y la de San Antonio en Alicante. Cepsa por su parte se ha hecho con la que supondrá un mayor canon anual, la de Castellón en Benicarló, y otra en Alicante, la de La Marina cerca de Benidorm.
La otra zona de servicios, la de La Safor cerca de Gandía (Valencia), ha quedado en manos de BP.
El gran perdedor del concurso público ha sido Repsol. La red de la petrolera española se presentó a los nueve lotes en liza, pero se ha quedado sin ninguna de las estaciones.
Otros candidatos que presentaron ofertas a alguna de las estaciones y se han quedado de vacío han sido Disa y el consorcio de CHM y LCA.
Canon anual de 16 millones
Los adjudicatarios pagarán en su conjunto un canon anual de 15,9 millones de euros al Estado, con lo que durante los cinco años previstos las arcas públicas ingresarán casi 80 millones.