Turismo y Viajes

HUELVA... para comérsela

  • Hay cosas difícilmente descriptibles, pero que sin embargo tienen inequívoco nombre: Jabugo.

Es importante saber que recientemente el pueblo de Jabugo ha cedido su universal nombre a la Denominación de Origen (dopjabugo.es) de esta joya gastronómica que es el jamón ibérico de bellota. En los 31 municipios serranos comprendidos entre la Sierra de Aracena y los Picos de Aroche se curan los jamones de los cerdos criados en este ecosistema ancestral de encinas, alcornoques, robles y quejigos; cuyo fruto, la bellota, transforma la carne de cerdo en ese el milagro llamado ?pata negra?.

Con la designación de Huelva como Capital Española de la Gastronomía 2017 (capitalespanoladelagastronomia.es) se ha creado la Ruta del Jabugo (rutadeljabugo.travel) para que el visitante no solamente se instruya acerca del jamón, sino que tenga también la oportunidad de visitar otras poblaciones con grandes alicientes turísticos. Existen dos museos del Jamón: en la localidad de Aracena y el que tiene la empresa Sánchez Romero Carvajal, en Jabugo, donde podemos 'interpretar' las experiencias sensoriales del jamón 5J (cincojotas.com) en toda su riqueza.

Aliciente turístico es también la Gruta de las Maravillas (aracena.es), que se encuentra en la localidad de Aracena. Se trata de una serie de galerías esculpidas por el agua y el tiempo con más de mil metros de recorrido subterráneo repleto de estalactitas, estalagmitas y lagunas de agua turquesa. Según palabras del guía: "sólo hay que dejar rienda suelta a la imaginación para entender el significado de la sala de los desnudos".

Aracena. Gruta de las Maravillas.

Parada obligada de la ruta es Linares de la Sierra, un precioso pueblo de calles empedradas y lleno de rincones de foto, que además tiene un magnífico restaurante de nombre Arrieros (arrieros.net) a cargo del chef-propietario Luismi López; donde los productos del cerdo ibérico (pluma, secreto, castañeta, carrillera, presa,) cobran especial categoría.

En el mismo pueblo sorprende descubrir el Hammam Linares (lamolinilla.com), que ofrece -con cita previa- baños, masajes y sauna.

Para acompañar a la pitanza es imprescindible elegir un buen vino, y lo primero es conveniente informarse en el Centro del Vino del Condado de Huelva (turismohuelva.org), ubicado en Bollullos Par del Condado, uno de los pueblos vitivinícolas más representativos de la comarca onubense Condado-Campiña. La elección no será fácil: los hay olorosos-secos, dulces de moscatel, generosos, tintos afrutados... incluso cavas. Pero si quiere probar un vino exótico, aventúrese por un vino-naranja, donde el aroma del cítrico impregnará su paladar.

En el tour por Huelva capital es imprescindible curiosear por los puestos del Mercado del Carmen para -entre otras muchas sabidurías- aprender los nombres autóctonos de los pescaítos: verdigones (berberechos), chocos (sepias), puntillitas (chopitos). Y, si el apetito se manifiesta, recalar en Casa Miguel (fundada en 1868), en el mismo mercado, un buen lugar para picar los típicos tollos (lomos del pintarroja secos) con tomate, o su raya al pimentón que tanta fama le ha dado.

La cocina tradicional tiene su morada en la abacería La Abundancia (tel.: 606893589), es decir: abundantes bandejas de gamba roja, y demás manjares típicos de la zona, como pueden ser las almejas a la marinera, el atún encebollado, las coquinas (con perejil, ajo y vino blanco) o las habas 'enzapatás'... Y de beber: ponche colombino.

El toque exótico-fusión de la ciudad lo pone Sonia Gil en el restaurante Kon Dao con la ensalada de coliflor frita con rúcula, alcaparras y granada. La cocina moderna está en Kalaka (Avda. Martín Alonso Pinzón, 20), con (por ejemplo) su entrante de espinacas templadas, miel de mostaza, bacalao ahumado y escamas de parmesano. Y la experiencia sensorial y artística está excelentemente representada por el chef José Luis, del Almenta (@almentabar), donde su menú de 55 euros tiene los siguientes pasos: paté de hígado de pollo con fresa deshidratada, salmorejo de mango con salchichón y albahaca, croquetita con mayonesa de jamón, gamba blanca en canelón con choco sobre guacamole, ajoblanco de piñones con huevas de trucha y langostino, y pez espada sobre lecho de guisantes.. Todo ello maridado con vinos del Condado, como el Libero -100% uva zalema, autóctona de Huelva- y el fino/generoso Espinapura.

Salmorejo de mango.

Quizá no lo sabía, pero Huelva parece estar hecha para satisfacer paladares exigentes.

Huelva está para comérsela.

Patronato Provincial de Turismo de Huelva: www.turismohuelva.org

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