Durante décadas los turistas sencillamente venían a España. No había necesidad de esforzarse en "venderles" el destino porque era una elección casi natural dadas las alternativas. Ese panorama cambió y España tuvo que comenzar a promocionarse a medida que emergían nuevos destinos competidores. El presidente de la Asociación de Turismo de Madrid y ministro de Turismo en el último Gobierno de Felipe González, Javier Gómez Navarro, no tiene reparos en afirmar que "en España no ha habido marketing turístico hasta hace 10 ó 15 años" porque "los turistas venían; no hacía falta más".
De alguna manera, hoy en día se repite una situación análoga. Ante las dificultades que atraviesan los destinos turísticos que son competencia, España vive una época de bonanza turística que suma mes a mes nuevos máximos históricos en llegada de turistas. Pero el ex ministro alerta de que cuando los países vecinos del Mediterráneo dejen de tener problemas, "tendremos que enfrentarnos a una bajada del turismo". De nuevo el marketing turístico estará en el foco del debate y de la política turística.
Gómez Navarro hacía estas declaraciones ayer, en la apertura de una jornada sobre las perspectivas del sector hotelero organizada por la consultora EY para presentar su informe Global Hospitality Insights. El político también afirmó que "Turquía es el gran competidor para España" y que el elemento fundamental hoy es "redefinir los destinos".

Gómez Navarro en el foro convocado por EY.
El presidente de la Asociación de Turismo de Madrid llamó asimismo la atención sobre el carácter transversal del sector turístico, en el que confluyen múltiples factores vitales, como la seguridad ciudadana o las infraestructuras. Por eso -manifestó- "una política turística no la puede hacer un ministro de Turismo"... Por lo menos, nunca en solitario.
Repartir los beneficios del turismo
En su intervención, Gómez Navarro abordó una cuestión social que comienza a ser preocupante: el rechazo al turismo en algunos destinos españoles debido a la saturación alcanzada. "O el dinero que entra por el turismo beneficia claramente también a la población no turística, o habrá un rechazo hacia el turismo", advirtió el político. El peligro está en que los ciudadanos empiecen a sentir que los turistas "se apropian" de los bienes públicos mientras que el beneficio de la actividad turística se concentra en un grupo reducido de personas.
Gómez Navarro acusó a los hoteleros de Baleares de haber tenido "poca visión" en no darse cuenta de que esto estaba sucediendo. Los hoteleros, "que han sido unos maestros en la gestión de los costes", son los más beneficiados de la actividad turística desde la percepción de la gente -argumentó- y por ello deben cuidar especialmente este tema. "Hay que hacer evidente que parte del dinero ganado repercute en la sociedad, con patrocinios o mediante otras fórmulas", concluyó el ex ministro.