El otoño es una época perfecta para pasar las tardes viendo una serie en la comodidad del hogar. Desde ahí te puedes transportar a rincones del mundo impresionantes e incluso a reinos de ficción. Sin embargo, muy cerca de Madrid existen algunos de estos lugares, un paseo al que no se tarda ni una hora en llegar.
Talamanca de Jarama es uno de estos lugares, un pueblo amurallado que destaca por tener una esencia medieval que invita a los visitantes a conocer el lugar. De su historia destaca la función estratégica que tuvo durante la Edad Media, pero hoy es conocido por haber acogido más de 130 películas y otras tantas series de televisión.
Lo cierto es que en Talamanca se puede encontrar numerosos edificios nobles del siglo XVII, lo que evoca a la perfección la atmosfera de otro tiempo. Tanto ojos de cineastas norteamericanos como españoles se han fijado en el lugar, sobre todo en zonas como la iglesia parroquial de San Juan Bautista o el puente romano sobre el arroyo del Caz son solo algunos de los monumentos que han visto convertirse a su pueblo en un auténtico set de rodaje.
Qué películas se han grabado en Talamanca de Jarama
Entre las películas más destacadas que se han grabado allí se encuentran La escopeta nacional, una comedia clásica de Luis García Berlanga, que refleja con humor la sociedad española de la época. También se filmó El espíritu de la colmena, una obra icónica de Víctor Erice, que aborda la posguerra española a través de la mirada de una niña.
Además, la serie Los hombres de Paco utilizó el pueblo como escenario para algunas de sus tramas, lo que contribuyó a su popularidad en la televisión. La versatilidad de Talamanca ha atraído a muchos directores en busca de un ambiente tan pintoresco, lo que ha consolidado su reputación como un set de filmación al aire libre.
Además de su historia, Talamanca es un refugio natural. Las estepas cerealistas de los ríos Jarama y Henares, protegidas bajo la ZEPA, albergan especies como la avutarda común y diversas aves rapaces. Los entornos del río Jarama y sus afluentes crean un hábitat biodiverso, ideal para amantes de la naturaleza. Este equilibrio entre patrimonio cultural y riqueza ecológica hace de Talamanca de Jarama un destino único para ir en otoño.
