Madrid
Palladium Hotel Group, grupo hotelero propiedad de la familia Matutes logró en 2023 un resultado bruto de 277 millones de euros y rebajó su beneficio neto hasta los 47 millones de euros. Las cifras se han plasmado por Residencial Marina, la cabecera de un conjunto de sociedades del grupo que está controlado de forma directa o indirecta por los hermanos Matutes Prats e hijos, en un informe de pagarés emitido por Grupo Empresarial Matutes (GEM) en el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF).
Residencial Marina explica en su informe que el core business del grupo se encuentra en el sector del turístico, que supone el 70% de la facturación gracias a los hoteles que el grupo tiene principalmente en España (5.879 habitaciones) y México (3.210 habitaciones), aunque también en República Dominicana (2.375 habitaciones), Jamaica (1.054 habitaciones), Brasil (654 habitaciones) e Italia (469 habitaciones).
El resto de segmentos del grupo son eventos, espectáculos y actividades relacionadas (15,6%) inmobiliario (4%), corporativo (6,5%) y otros negocios (3,7%). La deuda financiera neta es de 619 millones de euros a cierre de 2023, lo que supone una ratio de apalancamiento de 2,23 veces la ratio de deuda contra el ebitda.
La compañía logró ingresos de 1.104 millones de euros, un 14,1% más que en 2022. La cifra está en línea de las ventas proyectadas por Abel Matutes, presidente de Palladium, y Jesús Sobrino, consejero delegado, en la última edición de la feria internacional del turismo (Fitur).
Listado de riesgos
En la documentación consultada de su programa de pagarés, cuyo importe es de 50 millones de euros y será utilizado como vía alternativa a la financiación bancaria, el grupo Palladium emite un listado de riesgos a los que está asociado su actividad. Destacan los factores macroeconómicos (subida de tipos por parte del Banco Central Europeo o previsiones del Fondo Monetario Internacional) y las tendencias negativas en las condiciones geopolíticas nacionales e internacionales.
La compañía también menciona la elevada competitividad del sector en el que opera o al que está expuesto, como sucede con el sector inmobiliario, que "influye directamente en la rentabilidad del negocio a través de diversos factores como, por ejemplo, el acceso a financiación y el coste asociado a la misma y el riesgo de valoración de propiedades", asegura en el informe.