
Orbea cerró 2023 con una facturación de 374,4 millones, un 6,4% menos respecto de los 400 millones logrados el año anterior, y tras registrar dos ejercicios con crecimientos por encima del 40%. Según el fabricante vizcaíno de bicicletas la caída responde al "complejo escenario que sufre el sector ciclista", con un exceso de oferta y grandes descuentos.
La cooperativa, que emplea a más de 1.000 trabajadores, califica 2023 como "extremadamente inestable", aunque asegura que la reducción del negocio ha tenido "una mínima afectación al margen, lo que ha generado unos resultados alineados con los últimos tres años y superiores a la media del sector".
La cooperativa del grupo Mondragon, ubicada en Mallabia (Bizkaia), ha celebrado su asamblea general donde ha constatado la consolidación de un proyecto empresarial que ha duplicado el número de empleos en los últimos tres años, de los cuales el 80% corresponde a empleo generado en el País Vasco.
Según Orbea, "2023 ha sido un año marcado por un contexto extremadamente inestable donde el exceso de oferta y la búsqueda de liquidez ha obligado a las marcas a realizar grandes descuentos de forma generalizada, deteriorando de manera crítica los márgenes y llegando a cuestionar en muchos casos la sostenibilidad de los negocios.
Apuesta por la movilidad urbana
Orbea prevé una evolución similar para el presente 2024, año en el que la cooperativa continuará con su apuesta por la movilidad urbana, con lanzamientos de bicicletas, y con acuerdos como el logrado con el equipo ciclista belga Lotto Dstny, que usa ya las bicicletas Orbea en la competición y permiten a la compañía afrontar los retos del futuro.
El presente ejercicio ha comenzado bajo las mismas circunstancias de mercado, según señalan desde Orbea y "todo parece indicar que el año vendrá marcado por un contexto similar". En este sentido, "las proyecciones más optimistas estiman cierta estabilización a finales de año, pero, en cualquier caso, Orbea seguirá trabajando muy cerca de sus principales aliados, la distribución", aseguran.
La marca Orbea, con más de 180 años, ya está entre las 10 más reconocidas de la industria mundial. En 2015, cuando comenzó su proceso de transformación, la cooperativa facturaba unos 70 millones y competía con marcas internacionales con ingresos que superaban los 1.000 millones de euros.