
La aerolínea Volotea amplía su flota con tres nuevos aviones Airbus A320 para responder al aumento de capacidad y las nuevas rutas previstas para este año, con las que espera ampliar su presencia en pequeñas y medianas ciudades por toda Europa. Las nuevas incorporaciones se suman a los seis aviones del mismo modelo que ya incorporó en 2022 dentro del proceso de renovación de flota iniciado un año antes, y contarán con motores CFM y capacidad para 180 pasajeros.
Con estas tres llegadas, Volotea alcanza un total de 44 aviones: 20 aparatos Airbus A319 y 24 aviones A320. Los últimos en llegar arrancarán sus motores en abril, coincidiendo con el inicio de la temporada de verano, y permitirán cubrir el aumento de capacidad previsto para todo este año.
La aerolínea española ha programado 450 rutas para todo este año y unos 80.000 vuelos con los que ofertará entre 12,5 y 13 millones de asientos —espera ampliar capacidad un 15% respecto al año pasado— para transportar a unos 12 millones de pasajeros, un 60% más que en 2019. El año pasado transportó 10,4 millones de viajeros en 70.000 vuelos con una ocupación media del 92%.
Creciendo por Europa
"Estamos muy orgullosos de seguir creciendo en línea con los planes de expansión que teníamos previstos para este año y de hacerlo de la mano de Airbus como socio. La incorporación de los nuevos aviones nos ayudará a hacer frente a la demanda del verano, la época de más actividad para la compañía. Además, el Airbus A320, más moderno y eficiente, nos ayudará a seguir mejorando nuestra competitividad y la consecución de nuestros objetivos de reducción de emisiones", señala Stephen Rapp, director financiero (CFO) de Volotea.
A día de hoy, está presente en 110 aeropuertos de toda Europa, con una presencia destacada en los mercados francés, español e italiano. Cuenta con 21 bases a lo largo del continente, de las cuales dos se han incorporado este año: Brest, en la Bretaña francesa, y Bari, en la Apulia italiana.
Renovación de flota en marcha
En 2021, la aerolínea lanzó la renovación de su flota y cambió de proveedor: pasó de volar con Boeing 717 a hacerlo con Airbus A319 y A320. Desde Volotea aseguran que su apuesta permite "una opción más limpia y eficiente en el consumo de combustible por pasajero y kilómetro, que las operaciones de Volotea sean más respetuosas con el medio ambiente y contribuye a alcanzar los objetivos de reducción de emisiones de la aerolínea".
A ese respecto, la compañía se ha fijado el objetivo de reducir en un 50% las emisiones directas de CO2 para 2025. Para llevarlo a cabo está trabajando en iniciativas como optimizar mediante Inteligencia Artificial (IA) todas las fases del vuelo; lavar los motores y revestimientos de las aeronaves más frecuentemente; o usar un solo motor durante las operaciones en tierra. También en 2022 comenzó a usar los combustibles sostenibles de aviación (SAF) .