
Punto de inflexión para Renfe. El operador público ha logrado el primer beneficio neto mensual en este 2023 en abril. Así lo ha comunicado el consejo de administración, que ha sido informado de los resultados obtenidos por la compañía durante el cuarto mes del año y también el acumulado del primer cuatrimestre. Los números negros vuelven gracias al gran crecimiento de la demanda, la mejora del resultado bruto de explotación y la contención en el gasto.
La compañía presidida por Raül Blanco destaca el resultado positivo en el mes estanco de abril, en el que Renfe ha conseguido 2,81 millones de euros de beneficio neto. Es el primer mes de este año 2023 en el que el grupo consigue no cosecha pérdidas.
"Los primeros meses de cada año son tradicionalmente negativos para el tren, con una movilidad que repunta con la celebración de la Semana Santa, que este año ha tenido lugar en abril", explica la compañía dependiente del Ministerio de Transportes.
El vuelco del resultado en abril se debe a que a la Semana Santa se han unido este mes eventos como la Feria de Abril, la celebración de Sant Jordi, la gran Operación Salida del 28 y 29 de abril (con motivo del puente del 1 de mayo) y otras operaciones puntuales.
En el periodo acumulado del año, no obstante, la compañía todavía sigue en pérdidas (-67,6 millones de euros), aunque recorta los números del mismo periodo del año anterior (-97,1 millones). La buena noticia es que de enero a abril a compañía ya suma 170,4 millones de viajeros, 40,1 millones de viajeros más (+31%) que en el mismo período de 2022. Destaca en este sentido el crecimiento en los Servicios Públicos de Cercanías y Media Distancia como consecuencia de la medida de abonos gratuitos aprobada por el Gobierno.
Por el lado de los gastos, Renfe justifica que se encuentra "inmersa en un importante esfuerzo de contención", aunque los costes han aumentado entre enero y abril un 2,3% (28 millones de incremento), pasando de 1.233 millones a 1.261 millones en el mismo período de 2023.
El AVE frente a la competencia de Iryo y Ouigo
Al margen de los servicios públicos, la compañía ha puesto incremento de la demanda en el AVE, el producto estrella de la alta velocidad de Renfe, que a pesar de la entrada en España de la competencia italiana (Iryo) y francesa (Ouigo) ha crecido en el primer cuatrimestre un 15'1%, con casi 900.000 nuevos viajeros en este período.
La compañía ha vuelto a explicar los problemas operativos que sufre por el retraso en la entrega de los trenes Avril de Talgo, que ya ha puesto fecha al inicio de las operaciones comerciales. Renfe cuenta con el mismo número de trenes que tenía hace más de 10 años y, sin embargo, "la empresa ha tenido que atender, con ese mismo material, necesidades surgidas de aperturas de nuevas líneas, con la llegada de la alta velocidad a Alicante, Granada, Ourense, Murcia o Burgos, por ejemplo", ejemplifica la compañía.
Los últimos datos de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC) muestran que el operador público mantiene la mayor cuota de mercado en los tres corredores en los que operan varios rivales. Así, en el eje Madrid-Barcelona tiene el 48% de la cuota con AVE y el 10,6% con Avlo. En el corredor Madrid-Valencia, no obstante, la marca principal tiene el 43,3% de cuota y Avlo el 17,2%.
El corredor con mayor dominio es el Madrid-Sevilla y Madrid-Granada/Málaga, donde Renfe tiene un 99,98% de cuota e Iryo solo un 0,02%, ya que los datos recogidos por Competencia recogen apenas unos días de operación en Andalucía del grupo hispano-italiano.