Como si de un safari se tratara, a bordo de un Land Rover Santana descapotable de 1989 recorren los turistas la finca de LanGenal, una pequeña empresa ubicada en Alpandeire (Málaga) que ha puesto en marcha recorridos turísticos con el fin de poner en valor el cerdo ibérico del Valle del Genal.
Un paseo que muestra la vida de estos animales en libertad a orillas del río Genal, donde se alimentan principalmente de bellota y castaña, lo que da a su carne un particular dulzor. La ruta enseña el proceso desde que el cerdo nace hasta que va al matadero, la compleja orografía de este terreno y las distintas variedades de árboles cuyos frutos le sirven de sustento.
Al finalizar el recorrido por el hábitat natural del cerdo ibérico, la compañía ofrece a los participantes una degustación de sus productos. Delicias de jamón, salchichón o caña de lomo elaboradas de manera tradicional y siguiendo las recetas de antaño.
La finca de Ibéricos LanGenal, ubicada en Faraján, cuenta con una extensión de 340 hectáreas de terreno en las que actualmente habitan unos 260 cerdos ibéricos.
"En las ferias de promoción gastronómica a las que acudimos vimos que el consumidor no conoce bien el producto ibérico y todas las variedades que existen, ante ese desconocimiento surgió la idea de poner en marcha esta ruta, para que el cliente conozca la zona y lo que el cerdo supone, porque es el producto estrella de la gastronomía española", comenta a elEconomista Andalucía José Antonio Ruiz, propietario y gerente de Langenal.
La iniciativa ha comenzado este mes de diciembre con grupos reducidos de unas diez personas y la empresa ya está en negociaciones con varios hoteles de la Costa del Sol para acercar este peculiar recorrido turístico al público extranjero.
"Por ahora, el perfil de cliente está siendo mayoritariamente parejas de entre 40 y 50 años, todos se van muy contentos, aprenden mucho y conocen datos curiosos sobre el sector del cerdo ibérico", comenta el empresario.
Impulsar la economía rural
Un proyecto que pretende además impulsar la economía de una comarca formada por pequeños municipios de menos de 300 habitantes y duramente azotada desde hace décadas por el éxodo rural.
"Nosotros indirectamente aportamos mucho, si estas visitas siguen creciendo, cada día llegarán grupos de diez personas a estos pueblos de 200 habitantes, eso tendrá un gran impacto en su economía. Además, nuestras rutas se pueden combinar con actividades de senderismo por el bosque de cobre o incluso con alojamiento en casas rurales", señala Ruiz.
LanGenal trabaja con el cerdo ibérico desde hace alrededor de 30 años y recientemente ha puesto en marcha la venta sus derivados, la compañía apuesta por el mercado digital y solo cuenta con tienda online, además de las ferias gastronómicas y las rutas en las que también se podrán comprar sus productos.
"Los productos del Valle del Genal son distintos, es el único lugar de España en el que los cerdos se crían comiendo bellota y castañas, además la orografía del terreno hace que los animales trabajen más por lo que la carne es de mayor calidad. Queremos que los cerdos del Valle del Genal tengan su nombre, que se reconozca lo que hacemos en esta zona, poner en valor este lugar único en el mundo", concluye el impulsor de la iniciativa.