
El cofundador de Google, Larry Page, dice adiós a Kitty Hawk y, con ella, a su sueño de lanzar al mercado su propio coche volador. Así lo ha anunciado la propia empresa de aviación eléctrica a través de un escueto mensaje publicado en sus cuentas oficiales de Twitter y LinkedIn. En él, la compañía señala que se encuentra liquidando todas sus operaciones, aunque los próximos pasos a seguir todavía no se han concretado.
Fundada en 2010 por el pionero de los coches autónomos Sebastian Thrun, Kitty Hawk nació con el objetivo de desarrollar aviones eléctricos de despegue y aterrizaje vertical. Esta tecnología llamó la atención de Page, quien decidió dar su apoyo al proyecto.
Tras años de secretismo, la empresa presentó en 2017 su primer coche volador, el Flyer. Se trataba de un vehículo monoplaza de despegue y aterrizaje vertical, capaz de volar hasta 32 kilómetros, totalmente eléctrico, ultraligero y con un diseño pensado para que cualquiera pudiera usarlo. En ese momento, Thrun aseguró en una entrevista a la CNBC que estos modelos podrían surcar los cielos en cinco años. Un vaticinio que no se llegó a cumplir, pues tres años, 111 aeronaves y más de 25.000 vuelos de prueba con éxito después, Kitty Hawk decidió cerrar el proyecto.
Al año siguiente, vio la luz Cora, un aerotaxi que hizo historia al convertirse en el primero en obtener la certificación de la Administración Federal de Aviación de EEUU para aeronaves con pasajeros y pilotaje remoto. En 2019, esta creación se escindió en una empresa conjunta con Boeing llamada Wisk. El fabricante estadounidense ha invertido otros 450 millones de dólares en el operador de vuelos autónomos en 2022, según publica Techcrunch.
Kitty Hawk decidió entonces centrar toda su atención en el desarrollo de Heaviside, un nuevo vehículo eléctrico más silencioso y con capacidad para volar y aterrizar en cualquier lugar sin intervención humana. Algo que no pudo hacer debido al surgimiento de los primeros competidores, entre ellos Beta Technologies, Joby Aviation, Lilium y Volocopter. A esta presión se sumaron, además, las diferencias entre Thrun y el líder del programa Heaviside, el físico e ingeniero eléctrico Damon Vander Lind, que desembocaron el despido del segundo en mayo de 2021.
Antes de conocerse la noticia de su cierre, Kitty Hawk se encontraba inmersa en el desarrollo de su primer taxi aéreo comercial, un vehículo sería pequeño, ligero y silencioso que los del programa Heaviside, según se puede leer su página web.