El coloso online liderado por Jeff Bezos ha conseguido destartalar los modelos de negocio de las minoristas tradicionales ofreciendo a sus clientes toda clase de productos, desde ropa, complementos, cosméticos, productos electrónico o alimentos. Sin embargo, Amazon, lleva años intentando probar suerte en la industria farmacéutica mediante la venta de medicamentos.
Un mercado complicado, debido la regulación y supervisión que implica, pero que la compañía está dispuesto a disrumpir como lo ha hecho con otros tantos. Según varias fuentes citadas por la CNBC, Amazon ha dedicado al menos una reunión anual en su sede en Seattle durante los últimos años a tantear su futuro como una posible farmacia online. Conversaciones que nunca han terminado de despegar hasta ahora.
Las mismas fuentes explicaron que debido al incremento de los costes de sanidad y la tendencia de que los propios consumidores sean responsables de buena parte del coste de sus tratamientos, Amazon ve en la actualidad una oportunidad importante para explorar este negocio con detenimiento. Eso sí, todavía es pronto para determinar si Bezos y sus chicos se lanzarán a competir con titanes de la talla de CVS o Duane Reade, con establecimientos físicos en todo el país y con relaciones ya creadas con las aseguradoras de salud.
Dicho esto, Amazon ha contratado un director gerente para su posible negocio de distribución y venta de medicamentos, con la previsión de seguir contratando personal para futuras operaciones dentro de este mercado. De momento, Amazon ha comenzado a vender recientemente suministros y equipos médicos en los Estados Unidos y ha publicado ofertas de empleo para lo que define como su "programa profesional de atención médica".
La compañía de Bezos ya distribuye medicamentos con receta en Japón a través de sus acuerdos con farmacias locales, donde los clientes de Amazon compran su medicación en la minorista online que envía la orden a una farmacia local, cuyo farmacéutico se asegura que el comprador tiene la prescripción apropiada antes de entregar la orden.
