"Ahora sí, ahora no". Foxconn mantiene un curioso tira y afloja con la administración Trump, alternando alegrías y disgustos en suelo estadounidense. El fabricante chino responsable de la ensamblación de los iPhones e iPad de Apple, así como de multitud de productos de otras grandes marcas, se hace valer con el proyecto de una planta de producción en suelo americano.
Tras percatarse de la animadversión del inquilino de la Casa Blanca hacia todo aquello relacionado con China - a raíz de la tensión arancelaria entre ambos estados de los últimos meses- , la compañía asiática anunció su intención de salir de su país con tal de salvar su negocio. De esa forma, el pasado junio confirmó sus planes de deslocalizar algunas de sus plantas chinas para situarlas en otros países amigos de EEUU. Poco después, la compañía ha sorprendido a la comunidad tecnológica al apostar por los propios Estados Unidos para situar sus futuras plantas.
El nuevo 'amigo americano'
En concreto, Foxconn abría la puerta a construir una gran factoría de LCD (tecnología empleada para las pantallas de los smartphones, tabletas y paneles de TV) a cambio de recibir subvenciones por importe de 4.000 millones de dólares (3.570 millones de euros), con créditos fiscales, inversiones en infraestructuras y pagos directos en efectivo del estado. Es decir, Foxconn estaría dispuesto a dar una alegría a Trump, pero condicionado a que éste contribuya con notables ayudas fiscales. En ese caso, Foxconn crearía 13.000 puestos de trabajo (de forma directa e indirecta) y regaría de riqueza la zona, ya que también utilizaría suministradores locales. Ahora, según informa The Verge, "el plan de Foxconn de construir una fábrica de LCD en Wisconsin no está funcionando muy bien. Durante el último año, la compañía ha intentado cancelar el plan, reiniciarlo a instancias del presidente Trump, y luego reducirlo en su escala y echarlo atrás repetidamente, mientras compraba edificios vacíos en todo el estado".
Louis Woo, de Foxconn, ha mostrado el malestar de su compañía ante la atención mediática de cada uno de sus movimientos. En un vídeo de Yahoo Taiwan, el directivo explica que "Foxconn nunca ha operado de tal manera antes" al compararlo como "estar en una pecera de cristal, y somos los únicos peces dorados dentro de esa pecera". Según denunció, "normalmente no compartimos con la gente cuando vamos a construir. No importa dónde construyamos nuestra fábrica, normalmente no compartimos con la gente cuándo vamos a construir, ni qué tan grande es la fábrica, ni cuándo voy a contratar a tanta gente", tras apelar a la consideración de "secreto comercial". Por el momento, Foxconn ya ensambla modelos antiguos del iPhone en una planta en Bangalore (India), que vende directamente en aquel país, según reporta la agencia Bloomberg.