
Samsung ha retrasado el lanzamiento del Galaxy Fold, su smartphone plegable, después de una serie de problemas en las pantallas en las unidades de prueba enviadas a los medios.
El innovador teléfono iba a llegar al mercado estadounidense este mismo viernes, sin embargo, y los clientes que lo habían precomprado han quedado sumidos en la incertidumbre sobre cuándo llegará. Ahora, la operadora AT&T apunta a que será el 13 de junio cuando el Fold volverá a las tiendas.
Varios usuarios han subido capturas de pantallas a Reddit y Twitter con un correo electrónico de la teleco a los clientes que realizaron la compra del terminal antes de que se pusiese a la venta, a los que les emplaza al 13 de junio como fecha de recepción del envío.
Samsung ha explicado a The Verge que esta fecha no es indicativa y que no tienen ningún tipo de novedad con respecto a ajustarse a un nuevo timing del lanzamiento. Y es que la compañía no quiere que se vuelva a repetir una crisis reputacional como sucedió con el Galaxy Note 7, por ello, están centrados "en realizar algunas mejoras adicionales para garantizar la mejor experiencia de usuario posible".
Se desconoce si el mail de AT&T responde entonces a mantener viva la demanda de los consumidores interesados en el móvil más caro hasta la fecha de Samsung, que asciende hasta los 2.000 dólares, o si realmente se trata de la fecha en la que finalmente saldrá al mercado el Fold.
El Huawei Mate X, también llegaría en junio
Con la llegada en abril, Samsung se iba a apuntar el tanto de lanzar el primer smartphone plegable del mercado, adelantándose así al Mate X de Huawei. Ahora, si la fecha de AT&T se confirma, ambas compañías lanzarían en el mismo mes su teléfono que se dobla.
Fuentes internas de Huawei ha revelado al portal chino MyDrivers que pese a los problemas de su rival, ellos no planean retrasar el lanzamiento para someter a más pruebas al Mate X sino que también llegará el sexto mes del año.
En los últimos días había circulado el rumor sobre la posibilidad de que el Mate X pueda retrasarse hasta septiembre, una fecha menos ambiciosa y que daría más margen a la compañía china para probar el terminal en test internos, así como le permitiría eclipsar en parte a los nuevos iPhone.