
Las explosiones de baterías de litio, que llevan incorporados tanto los móviles, como tabletas y ordenadores, como el que hoy ha obligado a evacuar el metro de Madrid, son muy llamativas pero anecdóticas en comparación con el número de dispositivos de este tipo que hay en el mercado.
Así lo ha explicado el investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Ricardo Jiménez, quien opina que la tecnología que incorporan este tipo de baterías es "muy segura" y su probabilidad de deflagración es "muy escasa".
Hoy, el ordenador de una pasajera en el metro en Madrid se ha incendiado y ha obligado a interrumpir la circulación del convoy y a atender a nueve personas por crisis de ansiedad y a tres por inhalación de humo.
Lo cierto es que las baterías de litio llevan media década en el mercado, son usadas allí donde hace falta tener "mucha potencia y se tiene poco espacio", por eso, además de los dispositivos inteligentes, también lo incorporan desde bicicletas y monopatines eléctricos a una taladradora inalámbrica.
¿Por qué explotan las baterías?
Si son tan seguras y sus incidencias tan escasas, ¿en qué momento se produce una alteración de este tipo que las lleva a arder espontáneamente?
Su explosión se produce cuando hay algún fallo de fabricación o se ha generado por un golpe. Esto hace que la energía no circule adecuadamente y se genere un punto caliente en el que se acumula la energía y que es el que la perfora y genera la deflagración, que habitualmente "se trata de una explosión suave" y nunca "violentamente como una olla a presión", apunta.
Cuando se produce este tipo de incidentes, lo que se quema es todo el material plástico del dispositivo, que genera mal olor y un denso humo, con lo que el incidente se rodea con cierta espectacularidad.
Pese a los incidentes que se puedan ocasionar, la tecnología de esta baterías "es muy segura" y todas las baterías se prueban antes de comercializarse, este tipo de incidentes han comenzado a aparecer por llevar "al límite" los dispositivos.
"Si tienes 200.000 amperios en un metro cuadrado, estás apretando mucho la tecnología y todo tiene sus límites" explica el científico sobre la dinámica del sector, que desde hace años tiende a reducir el espacio y aumentar las prestaciones.