
Flippy, el robot cocinero que ha sido 'contratado' para hacer hamburguesas en la cadena de restauración Caliburger, ha tenido que ser desconectado en su primera jornada de trabajo, ¿el motivo? no ha sido capaz de coordinarse con el resto de los trabajadores.
El robot tiene la capacidad para cocinar 2.000 hamburguesas al día gracias a una serie de sensores, un brazo mecanizaro e inteligencia artificial, sin embargo, no ha servido a Caliburger para hacer frente al gran número de pedidos que se ha generado en las horas pico de demanda.
Anthony Lomelino, director de tecnología de Cali Group (matriz de Caliburger), ha explicado a USA Today que la robótica no ha tenido la culpa de la desconexión de Flippy, sino que la falta de coordinación entre el robot con el resto de humanos ha hecho imposible operar con normalidad. Y es que aunque Flippy cocine las hamburguesas, los filetes tienen que ser puestos en la plancha por un humano, y el personal es quien coloca los filetes en el pan con otros ingredientes.
El aliciente de ver a un robot cocinando hamburguesas ha disparado la presencia de clientes en el Caliburger de Pasadena, California, donde Flippy iba a comenzar a trabajar. Sin embargo, la descoordinación con los empleados de la hamburguesería ha hecho Flippy haya sido desenchufado por un tiempo prolongado hasta que se logre optimizar el rendimiento del robot y entrenar las facultades de coordinación de los empleados con la máquina.
Alternativa a la alta rotación
Aunque la desconexión de Flippy es por un tiempo indeterminado, la idea del grupo de restauración es seguir adelante con el proyecto de Miso Robotics, la desarrolladora del robot.
Y es que Caliburger explica que para ellos es difícil mantener a los empleados en la cocina, "los entrenamos, trabajan en la parrilla, se dan cuenta de que no es divertido y se van a conducir Ubers", explica John Miller, CEO de Cali Group, al diario. Con lo que tener un robot que automatice la parrilla puede suponer la solución a los problemas en esta situación clave de sus restaurantes.
De hecho, la compañía quiere, una vez que solucione los problemas de Flippy, llevar el robot a los 50 restaurantes que tendrá abiertos de aquí a final de año, siguiendo en otras ubicaciones de EEUU como Seattle, Washington y Annapolis.