
El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado hoy por unanimidad una proposición para que los vehículos de alquiler con conductor (VTC) necesiten una segunda licencia concedida por la Comunidad para prestar servicio de "transporte urbano", es decir, para operar en la ciudad, un requisito que ya es obligatorio para los taxistas.
Esta propuesta para tratar de equiparar ambos servicios, planteada por el socialista Chema Dávila, ha salido adelante el mismo día en el que el sector del taxi ha convocado un paro de 24 horas en toda España en contra la actividad de los VTC que operan plataformas como Uber y Cabify, además de una manifestación por las calles de Madrid.
Todos los grupos municipales han aprobado la proposición, que insta a la Comunidad de Madrid a modificar su Ley de Ordenación y Coordinación de los Transportes Urbanos para crear una "autorización de funcionamiento específica".
Asimismo, para "blindar" este cambio los socialistas madrileños plantean que el Consistorio inste también al Ministerio de Fomento a desarrollar en el Reglamento de la Ley de Ordenación de los Transportes Terrestres "las condiciones aplicables a los VTC en relación con el origen, destino o recorrido de los servicios" para regular así los ámbitos por los que puedan circular.
"Si no se regulan los VTC morirá el sector del taxi", ha subrayado Dávila, que ha recalcado que hay una licencia de estos vehículos por 6,8 de taxi, cuando la recomendación es que haya 1 VTC por cada 30 taxis.
El edil socialista ha señalado que el sector del taxi tiene perfectamente "marcadas" sus condiciones para trabajar, como horarios y días de descanso, frente a otro que está "absolutamente liberalizado".