
Quien diga que las líneas de fibra híbrida coaxial (HFC), popularmente definidas como cable, no tienen futuro deberá verse las caras con Vodafone. Por lo pronto, la tecnología que heredó la compañía de telecomunicaciones tras la compra de Ono todavía goza de un generoso desarrollo. Tanto que es capaz de alcanzar velocidades de descarga de 10 gigabits por segundo (Gbps o giga), lo que supone diez veces más que el giga que actualmente está al alcance de la versión más avanzada del cable, el Docsis 3.1. Así lo anunció ayer Vodafone en su primera presentación en el Mobile World Congress que hoy se inaugura en Barcelona. De lo anterior se desprende que las próximas evoluciones del referido cable o fibra híbrida de Vodafone se encuentra en perfectas condiciones para competir de igual a igual con la mejor fibra óptica hasta el hogar (FTTH) que utilizan sus principales rivales: Telefónica y Orange. El estándar HFC-que también emplea Euskaltel, Telecable o R- se considera híbrida precisamente porque utiliza fibra y cable, mientras que el FTTH solo emplea la fibra óptica.
Fuentes de Vodafone España explicaron ayer, en un encuentro con la prensa, que su tecnología de banda ancha ultrarrápida se podría aplicar en actividades como el ?streaming de televisión en ultra alta resolución 8K, descarga masiva de datos, realidad virtual y tres dimensiones (3D), realidad aumentada, medicina en casa, televisión 360 grados o videojuegos y todo en entorno doméstico en el que podrían estar todos funcionando de manera simultánea?.
En el caso de la nueva versión de HFC, Vodafone precisa que se trata de una solución que supera con creces la mera actualización de su red a Docsis 3.1 , ya que ?supone una nueva arquitectura banda en el despliegue de puntos de extensión de la red de fibra y en el aumento del ancho de banda disponible para cada cliente?.
Vodafone también ha desvelado sus grandes apuestas en banda ancha móvil, cuyo protagonismo descansa sobre la tecnología de radio M-MiMo, capaz de multiplicar por cinco la capacidad de las celdas de las antenas de telefonía 4G convencionales ?con haces de señal dedicados para cada usuario?, así como de reducir la latencia (tiempo de respuesta) también en cinco veces. Ese sistema, que ahora se estrena fuera de los laboratorios, consigue llegar con excelente calidad de red a un mayor número de dispositivos en relación con los sistemas tradicionales. Por lo tanto, las redes M-MiMo resultan idóneas en entornos de concentración de personas de forma concurrente. Además, la mejora en las infraestructuras móviles no requiere de un uso de espectro adicional y resulta compatible con terminales que ya están en el mercado. En este caso, Vodafone hará la demostración durante el MWC en una red comercial situada en el exterior de la Fira.
Extiende de la banda estrecha
La banda estrecha de Vodafone España para conectar dispositivos en lugares de escasa cobertura y tránsito, también denominada NB-IoT (Narrow Band Internet of Things), ya alcanza a ocho ciudades españolas. Hasta el momento, este tipo de infraestructura móvil sólo estaba desplegada en Madrid y Valencia y ahora se suman Barcelona, Bilbao, Sevilla y Málaga. El NB-IoT encuentra su especial utilidad para conectar contadores de gas, agua y luz, contenedores inteligentes, alarmas contra incendios, parquímetros y todo tipo de sensores.