
La compañía japonesa SoftBank anunció ayer la compra del gigante de los microprocesadores ARM por 29.000 millones de euros en efectivo con la intención de mejorar su división tecnológica para el Internet de las cosas.
Aunque con la compra la compañía nipona abre nuevas vías de negocio, sus inversores dudan sobre si realmente podrá digerir la operación y ser realmente viable. Ante esto, el millonario fundador y CEO de SoftBank, Masayoshi Son, ha invocado las enseñanzas del maestro Yoda de Star Wars para justificar la situación de su empresa tras la adquisición.
"Escucha la Fuerza, diijo Yoda en Star Wars. Si escuchas a la Fuerza, ésta es la mejor empresa para invertir en deuda", explicó Son a los inversores con la intención de aclarar sus dudas con respecto a cómo queda la deuda nipona tras la compra del fabricante de microchips británicos, según recoge Bloomberg.
Y es que la compra de ARM llega en pleno proceso de reestructuración de la deuda de SoftBank, y podría afectar al rendimiento de la deuda comprada por los inversores. En concreto, según Bloomberg, la probabilidad de riesgo del incumpliento de pago de la deuda de SoftBank subió al 0,5282% desde desde un 0,25% que tenía el año anterior.
Yoshihiro Nakatani, un gestor de fondos senior deTokio explica a la agencia que "lo que más nos preocupaba ha ocurrido. Desde el punto de vista de los inversores de bonos corporativos, tenemos que ser más conscientes que nunca del mayor riesgo que tenemos ahora".
La compra de ARM es la mayor operación realizada por SoftBank desde que en 2013 se hizo con el operador de telefonía móvil estadounidense Sprint, un precedente precisamente poco alentador. Y es que a día de hoy cuenta con 33.000 millones de dólares de deuda y aún busca un hueco para imponerse en el mercado de las telecomunicaciones de EEUU.