
La desaceleración de la economía china y el complicado panorama por el que atraviesa el sector tecnológico parece no haber pesado en Huawei, el gigante de telecomunicaciones chino. La firma podría superar este año a Samsung en venta de móviles en nuestro país. De esta manera, se convertiría en el primer mercado europeo en conseguir este liderazgo, justo cuando la firma cumple 15 años en España.
Sin embargo, Walter Ji, presidente de Consumer Business Group para Europa occidental opta por la cautela. En conversación con elEconomista durante el Mobile World Congress en Barcelona, Ji cuenta que este año se pueden quedar muy justos en la carrera por el número uno, y prefiere posponer el sorpasso hasta el próximo año.
Más allá de cuando se produzca el hito, los resultados de Huawei en nuestro país ilustran el meteórico progreso del gigante chino. En cinco años, ha pasado de tener 90.000 trabajadores a más de 170.000, y a multiplicar por tres sus ingresos hasta generar 60.000 millones de dólares el pasado año.
Pero todavía varias fuentes de la marca consultadas por este diario explican sin micrófonos que la compañía tiene que superar los recelos que provoca el made in China entre los consumidores occidentales. Por eso, Ji explica que el principal objetivo de Huawei para los próximos años será potenciar "la lealtad hacia la marca" y crear diseños cada vez más atractivos y variados. Para ello, han buscado el aura de marcas reconocidas como Swarovski para hacer sus relojes inteligentes.
Ji argumenta que el buen comportamiento de sus móviles en nuestro país se debe a que "los españoles son más abiertos" a probar otras marcas. Pero también subraya que detrás se encuentra un producto "tecnológicamente es muy sólido".
Sin embargo, cree que la huella de la crisis y la necesidad de los españoles de buscar buenos móviles a precios más asequibles sólo ha tenido un impacto "muy pequeño".
Aunque los móviles y otros gadgets son la cara más conocida de la firma, es la gestión de redes el principal área de negocio (alrededor de un tercio de los ingresos). La tercera pata, la de servicios para empresas, registra un comportamiento más irregular, aunque la compañía espera que crezca con la digitalización de la industria y el llamado Internet de las cosas.
Pero esta preeminencia de las redes es temporal, porque según las previsiones de la propia firma, su área de consumibles continuará creciendo hasta convertirse en el principal pilar. Como parte de esa estrategia de crecimiento, Huawei presentó durante el MWC un híbrido entre tableta y ordenador con dos sistemas operativos (Android y Windows 10) y con la que inauguraba su entrada en el campo de los ordenadores. Este crecimiento correrá paralelo a lo que, para el gigante chino es la batalla más importante: cambiar la percepción de los consumidores europeos sobre lo que representa ser una compañía china, dejando atrás la imagen de copias de mala calidad para simbolizar tecnología puntera. Una carrera en la que no se pueden permitir cometer errores, y con desafíos añadidos como el de proteger su independencia frente el riesgo de interferencias del gobierno chino. ¿Qué pasaría si Huawei recibiera de las autoridades de Pekín la petición de desbloquear un móvil de un terrorista como le ha sucedido a Apple con el FBI? "Esperemos que no tengamos que estar en esa situación, porque pondría en riesgo el negocio", reconocen sotto voce en la compañía.