
Se acabaron los juguetes por control remoto. La industria de la robótica y la aeronáutica se han aliado para crear el EHang 184, un cuadracóptero con ocho rotores que a primera vista no difiere mucho del que los Reyes Magos han dejado en miles de hogares estas paasdas fiestas, pero en cuyo centro hay una cabina en la que cabe perfectamente una persona.
Esta aeronave, que no es ni un helicóptero ni un avión, ha sido presentada esta semana en la prestigiosa feria Consumer Electronic Show (CES), en Estados Unidos, y se trata del primer vehículo de este tipo que se desarrolla. Pero lo verdaderamente novedoso no es, sin embargo, que su aspecto se parezca a un drone.
Es que es un drone, puesto que su principal cualidad es que hace las veces de taxi: el usuario no tendrá que saber cómo se pilota, porque de eso se encarga el propio aparato, que ha sido pensado para viajar en cortas distancias y a baja altitud.
Eso lo haría muy cómodo para desplazamientos en zonas densamente pobladas, evitando el tráfico rodado, pero también en suburbios donde, por ejemplo, el EHagn 184 podría hacer las veces de aerotaxi entre una vivienda y una estación de tren de cercanías, por ejemplo.
La experiencia del usuario es sencilla, puesto que el aparato sólo cuenta con una pantalla táctil, en la que éste selecciona su destino. El robot se encarga de todo lo demás, desde el despegue al aterrizaje, pasando por la selección de la ruta y -por supuesto- esquivando todos los obstáculos que puedan surgir en ella.
Por el momento, su principal limitación es el peso máximo, que roza los 100 kg y que es a todas luces escaso para la cada vez más obesa sociedad de EEUU. Tampoco la autonomía (23 minutos) o la velocidad (100 km/h) son de infarto, aunque si se tiene en cuenta que este drone puede volar en línea recta, eso le da un alcance de unos 30 km/h.
Este prototipo, que ya ha realizado más de vuelos en pruebas, se enfrentará ahora no sólo a la viabilidad comercial, sino especialmente a la calificación que le dé el regulador del transporte en EEUU, puesto que si bien ha sido pensado para transportar a personas, el hecho de que sea un drone podría facilitar que este nuevo medio de transporte caiga en la categoría de los robots voladores, mucho menos restrictiva con los requerimientos administrativos... y de seguridad.