
¿Quién te contratará en 2026: un responsable de recursos humanos o una IA? OpenAI cree que al menos será seguro un proceso híbrido y, por el camino, pretende quedarse con el pastel de LinkedIn.
OpenAI ha anunciado el desarrollo de una nueva plataforma de contratación impulsada por inteligencia artificial, llamada OpenAI Jobs Platform, que pretende conectar a empresas y empleados con una precisión mejorada gracias al uso de IA. Fidji Simo, CEO de Aplicaciones en OpenAI, afirmó que el objetivo es "encontrar coincidencias perfectas entre lo que las empresas necesitan y lo que los trabajadores pueden ofrecer".
El servicio tendrá una vía específica para pequeñas empresas y gobiernos locales, y se prevé su lanzamiento para mediados de 2026. Además, OpenAI ofrecerá certificaciones sobre "fluidez en IA" a través de su iniciativa OpenAI Academy, en colaboración con Walmart, con el ambicioso objetivo de certificar a 10 millones de estadounidenses antes de 2030.
¿Recuerdas la última vez que actualizaste tu perfil de LinkedIn esperando que esa palabra clave atrajera al algoritmo correcto? Ahora imagina que en lugar de un filtro pasivo, una inteligencia artificial analiza tu historial, tus habilidades, tus intereses, y te conecta directamente con la empresa que realmente necesita lo que tú sabes hacer. Esa es la promesa que lanza OpenAI, y no es poca cosa.
El anuncio de su nueva Jobs Platform, previsto para 2026, pone al creador de ChatGPT en el camino directo hacia uno de los sectores más maduros —y disputados— de internet: el reclutamiento profesional. Pero OpenAI no quiere solo competir. Quiere redefinir cómo las personas consiguen empleo en una economía transformada por la automatización, la IA generativa y la desaparición progresiva de trabajos tradicionales. ¿Estamos ante el LinkedIn del futuro o ante algo mucho más ambicioso?
OpenAI quiere reinventar el empleo… con su propia inteligencia artificial
Desde que irrumpió en la escena pública en 2022 con ChatGPT, OpenAI ha querido más que ser una herramienta de productividad. Quiere ser una infraestructura central del nuevo paradigma digital. Su Jobs Platform es un paso natural si se mira desde esta óptica. El objetivo parece claro: conectar lo que las empresas buscan con lo que los trabajadores pueden ofrecer, pero sin intermediarios humanos. Solo IA.
En un entorno en el que las recomendaciones laborales se basan en redes, filtros automatizados y algoritmos de coincidencia, OpenAI promete elevar el juego. Su plataforma usará sus modelos de lenguaje para interpretar no solo los CV, sino también las aspiraciones, los valores y las trayectorias vitales de cada candidato. Un cruce entre consejero laboral y cazatalentos omnipresente.
Este movimiento representa un cambio de terreno estratégico. OpenAI entra de lleno en el negocio de las aplicaciones prácticas (más allá del chatbot), en el mismo espacio en el que ya está invirtiendo con fuerza Microsoft, su mayor socio y accionista. Y lo hace en un momento en que la relación entre trabajo y tecnología está más tensa que nunca.
Un futuro con menos empleos y más certificaciones
OpenAI no ignora el elefante en la sala: la inteligencia artificial está eliminando empleos. Según Dario Amodei, CEO de Anthropic, hasta el 50?% de los trabajos de oficina de nivel inicial podrían desaparecer antes de 2030. La compañía de Altman no niega este diagnóstico, pero propone una solución paliativa: formar, certificar y reconectar.
Así nace la OpenAI Academy, un programa de formación y certificación sobre "fluidez en IA" que, en palabras de la compañía, permitirá a millones de personas adaptarse a las nuevas exigencias laborales. El objetivo inicial: certificar a 10 millones de trabajadores en EE. UU. en los próximos cinco años. Entre los primeros socios figura nada menos que Walmart, el mayor empleador privado del mundo, lo que da una pista sobre el alcance de esta iniciativa.
Si los trabajos cambian, el talento debe evolucionar con ellos. Pero en esta nueva economía del conocimiento mediada por IA, no bastará con títulos universitarios. Harán falta pruebas específicas de habilidades técnicas, capacidad de interacción con modelos de lenguaje, diseño de prompts y competencias digitales que aún no figuran en los currículos escolares.
La batalla por el control del talento laboral en la era de la IA
El verdadero enfrentamiento que se abre no es solo contra LinkedIn, propiedad de Microsoft. También es contra otras plataformas de emparejamiento profesional como Indeed, Glassdoor, Upwork o Fiverr, todas ellas amenazadas por una plataforma que promete precisión algorítmica, adaptabilidad en tiempo real y una interfaz completamente impulsada por inteligencia artificial.
Además, la propuesta de OpenAI introduce dos elementos disruptivos:
- Un canal específico para pequeñas empresas y gobiernos locales, dos segmentos históricamente mal atendidos por las grandes plataformas de empleo.
- Una IA entrenada no solo en lenguaje, sino en comportamiento humano y patrones de contratación, capaz de prever qué tipo de trabajador será más longevo, más satisfecho y más productivo en determinado entorno.
El desafío es tanto tecnológico como ético. ¿Cómo se garantizará la equidad en los algoritmos? ¿Qué protección tendrán los candidatos ante decisiones automatizadas? ¿Qué papel quedará para los profesionales de recursos humanos si una IA es más rápida, precisa y, teóricamente, imparcial?
Una plataforma laboral, un navegador y una red social: OpenAI quiere dejar de ser solo el creador de ChatGPT
En una reciente cena con periodistas, Sam Altman, CEO de OpenAI, confirmó que Fidji Simo liderará otras iniciativas además del Jobs Platform. Según filtraciones, OpenAI estaría trabajando también en un navegador y en una especie de red social, aún no revelada, lo que sugiere una estrategia ambiciosa de despliegue multicanal.
La lógica es comprensible: si ya se tiene la infraestructura de lenguaje y los datos de millones de usuarios a través de ChatGPT, ¿por qué no usarlo para crear productos integrados que compitan con Google, LinkedIn, Facebook y más?
Cada uno de estos movimientos señala una intención más grande: OpenAI quiere dejar de ser solo el motor detrás de productos de terceros para convertirse en creador de experiencias propias. Tal como lo hicieron Apple o Amazon en su momento. Y como ellos, también buscará controlar la interfaz, el canal y la comunidad.
¿Nos está preparando OpenAI para un mundo sin trabajo… o para uno con nuevos tipos de trabajo?
Lo que OpenAI plantea con su Jobs Platform no es solo un rediseño del currículum, sino una reinvención del valor laboral en la era de la inteligencia artificial. ¿Qué significa estar cualificado cuando los criterios los define una máquina? ¿Cuánto pesará una certificación emitida por OpenAI frente a un máster tradicional? ¿Qué papel tendrán los gobiernos en regular estas nuevas formas de evaluación y contratación?