
Nvidia y AMD han acordado entregar al Gobierno de Estados Unidos el 15% de los ingresos obtenidos por la venta de chips en China, como parte de un inusual acuerdo con la administración Trump para obtener licencias de exportación. Las dos compañías aceptaron este compromiso financiero como condición para recibir las licencias para el mercado chino, otorgadas la semana pasada. Nvidia aportará el 15% de los ingresos por ventas de su chip H20 en China, mientras que AMD hará lo mismo con los ingresos del chip MI308.
El Departamento de Comercio comenzó a emitir licencias para el H20 dos días después de que Jensen Huang, consejero delegado de Nvidia, se reuniera con Donald Trump, según avanza Financial Times. También se iniciaron los permisos para el chip de AMD destinado a China.
Expertos en control de exportaciones califican el acuerdo de "sin precedentes", ya que ninguna empresa estadounidense había aceptado antes pagar parte de sus ingresos para obtener una licencia. Sin embargo, encaja con el patrón de la administración Trump, en la que el presidente presiona a las empresas para que realicen inversiones domésticas u otras medidas a cambio de evitar sanciones o aranceles, con el objetivo de atraer empleos e ingresos al país.
Nvidia no negó el acuerdo y declaró: "Seguimos las reglas que fija el Gobierno de EEUU para participar en los mercados globales". Analistas de Bernstein estiman que, según las previsiones de Nvidia antes de las restricciones, habría vendido en 2025 unos 1,5 millones de chips H20 a China, generando alrededor de 23.000 millones de dólares.
El acuerdo llega tras la polémica por el H20, diseñado específicamente para China después de que el presidente Biden impusiera controles a chips avanzados de inteligencia artificial. En abril, la administración Trump anunció que prohibiría la exportación del H20, pero el presidente dio marcha atrás en junio tras reunirse con Huang. Semanas después, Nvidia expresó su preocupación porque la Oficina de Industria y Seguridad (BIS) no emitía licencias. El asunto se trató directamente con Trump y, dos días después, BIS comenzó a conceder los permisos.
El pacto ha generado críticas de expertos en seguridad nacional que alertan de que el H20 podría reforzar las capacidades militares chinas y debilitar la posición de EE.UU. en inteligencia artificial. Liza Tobin, exfuncionaria del Consejo de Seguridad Nacional, ironizó: "¿Qué será lo próximo? ¿Permitir que Lockheed Martin venda F-35 a China con una comisión del 15%?".
Varios miembros del BIS también han expresado su inquietud. En una carta reciente al secretario de Comercio, 20 expertos, entre ellos Matt Pottinger, pidieron que no se concedieran licencias para el H20, calificándolo de "potente acelerador" de la IA china con potencial uso militar. Nvidia rechazó esta interpretación y defendió que el chip no puede emplearse con fines bélicos.
En un comunicado, Nvidia afirmó: "Aunque no hemos enviado H20 a China en meses, esperamos que las reglas de exportación permitan a EEUU competir en China y en todo el mundo. No podemos repetir el error de perder el liderazgo, como pasó con el 5G. La tecnología de IA estadounidense puede convertirse en el estándar global si competimos con fuerza".
El debate sobre la política de control de exportaciones se produce en medio de conversaciones comerciales entre Washington y Pekín, que Trump espera conduzcan a una cumbre con Xi Jinping. El Departamento de Comercio habría recibido la orden de congelar nuevas restricciones para evitar tensiones con China. Pekín, por su parte, busca que se relajen los controles sobre chips de memoria HBM, esenciales para fabricar semiconductores avanzados de IA.