
Si tuviésemos que describir a los ciberdelincuentes de hoy en día, para muchos de ellos el adjetivo perfecto sería el de ingeniosos. Esto es porque están constantemente evolucionando sus trampas y engaños para hacerse con nuestra información personal y bancaria.
Como hemos mencionado en numerosas ocasiones, cada día aparece un nuevo tipo de ciberataque que combina distintos fraudes y técnicas para tratar de evitar los controles y las protecciones que cada vez más usuarios adoptan.
Pero no siempre tiene que ser una artimaña compleja en la que te hackean el teléfono o te introducen un virus a través de un enlace fraudulento, hay ocasiones en las que en la trampa es algo tan sencillo como la forma a la que contestamos a una llamada telefónica o las palabras que decimos durante una conversación.
Por desgracia suplantar la identidad de una persona, empresa o institución es mucho más sencillo de lo que podemos creer, eso significa que muchas veces cuando recibimos una llamada que parece legítima podría tratarse de un engaño. En estos casos, los "malos" buscan que digamos una palabra concreta para luego desatar un sinfín de estafas y engaños que acaba con nuestra cuenta bancaria vacía e incluso problemas legales a nuestro nombre.
¿Qué palabras no debes decir en una llamada?
Hoy en día nos enfrentamos a la amenaza de que los estafadores graben la llamada y por lo tanto guarden nuestra voz que posteriormente utilizan para autorizar transacciones financieras, contratos o incluso falsificar nuestra identidad. Esto puede ocurrir cuando nos llaman y al coger la llamada hay silencio al otro lado, o cuando nos dicen ser alguien que en realidad no son y nos hacen una serie de preguntas.
Los estafadores están esperando a que contestemos nosotros primero o que digamos alguna de estas "tres palabras prohibidas" durante la conversación:
- ¿Si? o Sí.
- De acuerdo.
- Acepto.
Consejos para protegerte de este fraude y otros
Para salvaguardar tu información y dinero, la prevención es fundamental. Aquí te ofrecemos una guía clara para evitar ser víctima de engaños por teléfono:
- Nunca compartas información sensible: no des datos personales, información bancaria o contraseñas por teléfono. Ninguna entidad legítima te los pedirá de esta forma.
- Cuelga ante señales de alarma: si hay algo que te hace dudar o pone en alerta, cuelga de inmediato sin dudarlo y bloquea el número.
- Revisa frecuentemente tu cuenta bancaria en busca de movimientos extraños o que tú no has hecho.
- Denuncia y bloquea números sospechosos o que parecen fraudulentos.
- Verifica antes de actuar: antes de nada asegúrate siempre que la identidad de la persona al otro lado es de verdad la que dice ser. Si hace falta, cuelga y llama a tu banco para seguir con cualquier trámite.