
El grupo aragonés Samca también ha puesto sus ojos en el sector de los centros de datos. La compañía anunció su proyecto de creación de un campus con tres data centers en la zona de la localidad de Luceni, en Zaragoza, a finales del mes de abril. Una nueva iniciativa empresarial dentro de la que se contempla una inversión global de 2.600 millones de euros y la creación de 2.300 empleos entre directos e indirectos y durante toda la fase del proyecto, incluyendo la de operación.
¿Pero qué hay detrás de esta inversión? El proyecto de Samca contempla la puesta en marcha de tres centros de datos dentro de Green IT Aragón, así como una serie de infraestructuras energéticas para suministrar la energía necesaria para el correcto funcionamiento de los data centers y garantizar su actividad durante las 24 horas de los 365 días del año. Además, se contemplan también inversiones en redes para la conectividad como fibra óptica, entre otras partes del proyecto.
El plan inversor arrancará ya en 2026, fecha en la que se contempla que comience la construcción de los centros de datos -se calcula para el segundo semestre-, momento en el que la compañía aragonesa iniciará el proyecto con una inversión inicial de 496 millones de euros.
En el ejercicio de 2026, Samca destinará así un total de 451,7 millones de euros para los campus de datos, mientras que se contempla una partida de 27 millones de euros para las instalaciones acometidas en materia de electricidad, fibra óptica, gas natural y agua.
Las inversiones también continuarán en el ejercicio de 2027 para el que se prevé destinar otros 27 millones de euros a estas instalaciones. Una cantidad a la que cabe añadir 451,7 millones de euros para los data centers. Ya, en 2028, el plan de la compañía aragonesa prevé invertir 344,8 para los centros de datos, aparte de 59 millones para la instalación de generación en su fase 1, correspondiente a la repotenciación de parques eólicos existentes. Esta misma cantidad y para esta misma actuación se contempla para el ejercicio de 2029 en el que Samca no acometerá más inversiones.
Posteriormente, la compañía aragonesa tiene presupuestados 820,7 millones para los centros de datos y 116 millones para la instalación de generación para el año 2030, también en su fase 1. La empresa no hará inversiones en 2031, pero las retomará en el año 2032 con 43 millones para la instalación de generación, en fase 1. Todo el plan inversor culmina en 2033 con 209 millones de euros con las instalaciones de generación en fase 2 (hibridación).
De este modo, se contempla que la inversión del proyecto del campus con los tres centros de datos alcance un valor agregado de 2.627 millones de euros, de los que 2.069 millones se destinarán a los data centers, mientras que 504,5 millones serán para instalaciones de generación renovable y 53,5 millones de euros a las infraestructuras de acometida de electricidad, gas, comunicaciones y agua que son necesarias para la operativa de los centros de datos.
¿Cuánto empleo generarán los centros de datos?
En materia de empleo, el proyecto, que fue declarado de interés general, estima una generación de puestos de trabajo de entre 1.690 y 2.300 empleos. De este modo, se calcula que, en las obras de urbanización, se empleará a 800 personas de forma directa, así como a entre 560 y 1.050 puestos de trabajo indirectos.
Sin embargo, en la fase de construcción, se prevé un impacto en el empleo de 190 puestos directos y entre 140 y 260 indirectos. Por su parte, en la fase de operación y mantenimiento de los data centers, se apunta a 150 puestos de trabajo directos y entre 90 y 150 indirectos.
Además, cabe añadir el empleo vinculado a las instalaciones de energía eléctrica renovable, que se cifran en unos 10 puestos directos y otros 10 empleos indirectos.
Energía propia
El campus de datos de Samca lleva consigo actuaciones en el plano de las energías renovables, segmento en el que la compañía arrancó su actividad en los años 90. De este modo, los data centers llevarán asociadas instalaciones de generación de energía eléctrica a partir de fuentes renovables. Así se hará un suministro en régimen de autoconsumo con excedentes y con conexión mediante líneas eléctricas enterradas a 220 kV, procedentes de las subestaciones eléctricas Cantales, Jalón PRE y Bayo.
En total, comprende siete parques eólicos, todos ellos propiedad de Molinos de Ebro SA, filial de SAMCA. En concreto, están asociados al data center Ribera Alta del Ebro los parques eólicos Atalaya, El Bayo y los Monteros, mientras que el centro de datos Ribera Alta Ebro II tiene vinculado el parque eólico La Serreta. Finalmente, el data center Atalaya del Ebro, está relacionado con el parque eólico El Tollo y Los Visos, de hibridación fotovoltaica en construcción en tramitación con el Ministerio, situación en la que igualmente se encuentra el parque eólico Valdejalón II.
En todos estos parques se actuará en la fase I o fase II del proyecto. En concreto, los parques que se repotenciarán (sustituir aerogeneradores por modelos de última generación y más potencia unitaria) en la primera fase de inversión son Atalaya (49,5 MWe), así como El Bayo (49,5 MWe), Los Monteros (22,5 MWe), La Serreta (49,5 MWe) y Los Visos (36,0 MWe). La previsión es pasar de 251 a 49 aerogeneradores, es decir, un 80% menos de molinos instalados.
El proyecto también contempla la implementación de una nueva central híbrida eólica-fotovoltaica de autoconsumo con excedentes, que incorporará almacenamiento mediante baterías. Esta Central Híbrida "Data Center Ribera Alta del Ebro" tendrá una potencia total instalada de 35,5 MWe.
De esta manera, la potencia total de estas instalaciones de generación de repotenciación eólica y nueva central híbrida de autoconsumo desarrolladas en una primera fase, será de 242,5 MWe, con una capacidad de producción de energía eléctrica renovable de 743 GWh/año.
A todo ello cabe sumar las actuaciones en la segunda fase, correspondiente a la hibridación. En este caso, se actuará en el parque eólico Atalaya con un nuevo módulo de generación de energía eléctrica de tecnología solar fotovoltaica de 30,0 MWe de potencia instalada, y con una instalación de almacenamiento mediante baterías de 22,5 MWe.
También se hibridará el parque eólico El Bayo, con un nuevo módulo de generación de energía eléctrica de tecnología solar fotovoltaica de 30,0 MWe de potencia instalada, y con una instalación de almacenamiento mediante baterías de 22,5 MWe, aparte de ampliarse e hibridarse La Serreta, con una ampliación del módulo de generación de energía eléctrica de tecnología eólica de 18,0 MWe de potencia instalada, un nuevo módulo de generación de energía eléctrica de tecnología solar fotovoltaica de 30,0 MWe de potencia instalada, y una instalación de almacenamiento mediante baterías de 22,5 MWe.
Las actuaciones comprenden a su vez la hibridación del parque eólico El Tollo, con un nuevo módulo de generación de energía eléctrica de tecnología solar fotovoltaica de 45,0 MWe de potencia instalada, y con una instalación de almacenamiento mediante baterías de 5,0 MWe, que ya está en tramitación.
A todo ello, se suma la ampliación de la instalación de almacenamiento mediante baterías de la Central Híbrida El Tollo (30,0 MWe) y la de Central Híbrida Los Monteros (13,5 MWe). En este caso, la potencia total de estas instalaciones desarrolladas en la segunda fase será de 328 MWe, suponiendo 147,5 MW de nueva capacidad de almacenamiento mediante baterías, con una capacidad de producción de energía eléctrica renovable de 294 GWh/año.
El proyecto requerirá a su vez otras actuaciones como la modificación de tres subestaciones existentes: Jalón PRE, Bayo y Cantales. Precisamente, esta última se amplía y además se desdobla en una nueva subestación, denominada Camporroyo. También se contemplan tres nuevas líneas directas de abastecimiento eléctrico para uso industrial, de tensión 220 kV, procedentes de estas subestaciones eléctricas. Además, se incluye la construcción de una nueva tubería de gas entre el punto de conexión y el campus de cuatro kilómetros.
Otras infraestructuras
El proyecto de Grupo Samca comprende a su vez otra serie de infraestructuras como dos vías de acceso rodado desde la A-68 a partir de viales de salida y entrada ya existentes, aparte de la captación de agua desde el Canal Imperial de Aragón y la red de gestión de aguas sanitarias, de proceso y de escorrentía.
Finalmente, toda la iniciativa se contempla con tres líneas directas de abastecimiento eléctrico para uso industrial a 220 kV, enterradas, procedentes de las subestaciones eléctricas Cantales, Jalón PRE y Bayo, y una nueva conexión en media tensión con la red de distribución para los usos públicos del Campus de Datos.
No faltan tampoco líneas de comunicaciones de alta capacidad, con conexiones redundantes a las redes troncales de fibra óptica que discurren cercanas al emplazamiento del Campus de Datos, y una conexión con el gasoducto de transporte Bilbao-Barcelona-Valencia, propiedad de ENAGAS, de 72 bar de presión.