
Dominion ha celebrado hoy su Junta General de Accionistas, donde ha reafirmado su intención de seguir avanzando en el cumplimiento de su plan estratégico y consolidar su transformación operativa. Una transformación que, según han precisado el presidente, Antón Pradera, y el CEO, Mikel Barandiaran, a elEconomista.es y el resto de medios que han acudido a la Junta, se centra en simplificar la compañía y vertebrarla sobre tres ejes de transformación: energética, digital e industrial.
Inmersa en pleno proceso de desinversión con la venta de sus parques solares de República Dominicana, México e Italia, la compañía vasca centrará ahora sus esfuerzos en el crecimiento inorgánico. Un crecimiento en el que la transformación industrial cobrará un papel protagonista, ya que entre sus planes destaca la puesta en marcha de un proyecto empresarial de servicios medioambientales enfocados a la industria.
Para ello, piensan adquirir pequeñas compañías locales, especializadas en descarbonización y economía circular, que puedan encargarse, fundamentalmente, de la gestión de residuos procedentes de plantas industriales. En este sentido, analizan la construcción de una planta en Tarragona, junto a la refinería que Repsol tiene en este territorio, y, aunque tienen varias firmas en el punto de mira, ya han puesto el foco en otras dos compañías, emplazadas ambas en Andalucía, según ha precisado Barandiaran.
Bajo esta reestructuración, el área de Dominion centrada en actividades de descarbonización y economía circular, Global Dominion Environment (GDE), ha experimentado durante el primer trimestre del año, un crecimiento del 6% en sus ingresos, hasta lograr los 113,7 millones. Además, con una rentabilidad que se sitúa en el 11,7% sobre ventas, esperan "un recorrido al alza" gracias a sinergias y mejoras operativas.
Diversificación estratégica
En cuanto al comportamiento de la unidad de Global Dominion Tech-Energy (GDT), éste ha sido "desigual". En Servicios, se ha registrado un crecimiento del 12% en facturación hasta los 115,1 millones y el margen de contribución sobre ventas asciende al 17,6%, impulsado por la buena dinámica de negocios, como el logístico-comercial, así como por la firma de nuevos contratos en telecomunicaciones y electrificación, especialmente en Latinoamérica (Chile y Colombia).
Por el contrario, la línea de Proyectos, protagonizada principalmente por desarrollos para centros hospitalarios, centros de datos y energías renovables, mantiene una ligera caída en ingresos hasta los 35,3 millones, pero conserva márgenes elevados sobre ventas, por encima del 24%, lo que refleja la rentabilidad de los activos en ejecución, advierten. Además, la cartera de proyectos energéticos y socio-digitales de Dominion asciende a 440 millones, mientras que su pipeline de proyectos renovables se sitúa en torno a los 2 GW.
Crecimiento del beneficio neto
En el balance del primer trimestre del año, Dominion ha reportado un beneficio neto atribuible de 9,1 millones de euros, un 25% más que en los tres primeros meses de 2024 "por la mejora operativa, la reducción de gastos financieros e impositivos y la depreciación del dólar estadounidense", señala la compañía vizcaína.
Sin embargo, la cifra de negocio consolidada cae un 7% y se sitúa en 264 millones, un descenso que el grupo atribuye a su "estrategia de simplificación" y a su "desinversión de actividades no estratégicas", mientras que el EBITDA aumenta un 9% de manera orgánica hasta alcanzar los 35,9 millones de euros.
Por último, la Junta General de Accionistas ha aprobado el reparto de un dividendo de 15 millones de euros con cargo a los resultados de 2024. Esta cifra supone un pay-out superior al tercio del beneficio ordinario, con el deseo de recompensar a sus accionistas ante su depreciación en Bolsa.