
La llegada de la nueva normativa de ciberseguridad, NIS2, va a traer consigo muchos cambios dentro de las empresas españolas –y europeas–. Y es que esta directiva promovida por la Comisión Europea, de obligatoria trasposición en los Estados Miembros, ya debería estar implantada desde el pasado octubre, aunque en España aún es un anteproyecto de Ley, por lo que aún le queda el largo trámite de pasar por el Congreso de los Diputados y validar su aprobación.
Pero, ¿qué va a suponer la implantación de esta ley en el conglomerado español? ¿Cuál es su alcance? Pues, a grandes rasgos, la llegada de la NIS2 al mercado nacional supondrá que el negocio de la ciberseguridad pueda llegar a multiplicarse por tres, debido a que son muchas las compañías que tendrán que establecer medidas para cumplir la normativa, tal y como cuenta a este periódico David Fernández, CEO de Cipher, la solución de ciberseguridad de Prosegur.
Y es que esta nueva normativa establece de forma mucho más clara cuáles serán las entidades afectadas. La anterior solo obligaba el cumplimiento a aquellas infraestructuras críticas, como las energéticas, sino que se extiende a muchos otros sectores: telecomunicaciones, gestión de aguas y residuos, sanidad, investigación científica, servicios digitales, sector aeroespacial o el agroalimentario, entre otros.
Precisamente este último es en el que pone el foco Fernández, ya que en España representa prácticamente el 10% del PIB y es uno de los menos preparados para actuar ante los ataques cibernéticos. El CEO de Cipher también destaca al sector de la distribución como otra de las claves del crecimiento en ciberseguridad en los próximos años.
Esto provocará, según explica Fernández, un auge en las alianzas implicadas en el segmento de la seguridad cibernética. Implica, por tanto, no solo a las soluciones tecnológicas como la propia Cipher, sino también a las aseguradoras, que tendrán "una oportunidad" para extenderel seguro de ciberriesgos. "Muchas compañías van a querer transferir el riesgo a este sector. Además, las aseguradoras van a contar con un marco, algo que les transmite seguridad a la hora de conocer con certeza cuándo actúa el seguro y cuándo no, haciendo este negocio más saludable", comenta Fernández.
Esa certeza también permitirá a las entidades poder hacer cálculos de primas más ajustados a la realidad de la empresa a asegurar. La popularización de los precios de estos seguros, no obstante, también dependerá de forma inevitable de las medidas que la compañía haya tomado en materia de ciberseguridad. "Si se dispone de unos protocolos contra los ataques cibernéticos, las aseguradoras lo tendrán en cuenta para rebajar la prima", concluye Fernández.