
Normalmente asociamos la ciberdelincuencia a un individuo en una habitación oscura que trabaja por sí solo robando y estafando a sus víctimas, pero no siempre es así, y al igual que otros negocios hay ocasiones en la que los ciberdelincuentes trabajan como una empresa multinacional.
Este es el caso de LockBit, una de las organizaciones de ciberdelincuentes más grandes del mundo, que debido a su tamaño y operaciones es considerada como una gran empresa dentro del sector del hackeo. Sus tentáculos de criminalidad han llegado a todas las partes del mundo, y es que hace tan solo unos meses llevaron a cabo un ciberataque contra el Ayuntamiento de Sevilla.
A este macro grupo criminal se le atribuyen el mayor número de ataques por todo el mundo con un modus operandi, que consiste en infectar un equipo o sistema con su virus malicioso mediante cifrado para bloquear el acceso a estos con el objetivo de chantajear posteriormente a sus víctimas a cambio de dinero. Afortunadamente se logró desmantelar la banda el pasado mes de febrero en una super operación conjunta llamada Operación Cronos, donde confiscaron los sistemas de este peligroso grupo.
Ahora, la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) de Reino Unido, en colaboración con Estados Unidos y Australia, han anunciado la identidad del líder de LockBit con intención de obtener ayuda ciudadana y lograr encontrar el paradero del cabecilla.
Según estos, se trata de un ciudadano ruso de unos 31 años llamado Dmitry Khoroshev, al que EEUU le acusa de cometer más de 26 cargos penales entre extorsión, robos, fraude y demás actividades relacionadas con la ciberdelincuencia y lo que hace que se enfrente a una pena máxima de 185 años, en el caso de que sea capturado.
Entre sus principales labores, Khoroshev se encargó de desarrollar, promover y supervisar el software con el que realizaban los ataques, además era el encargado de reclutar a nuevos 'afiliados'. Después de los ataques, cuando las víctimas pagaban los rescates, este se quedaba con el 20% de las ganancias.
Debido a su altísimo impacto, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos ofrece 10 millones de dólares por cualquier pista o información sobre su paradero que pueda facilitar la detención de Khoroshev.
Y es que, a pesar de los esfuerzos de la NCA y la confiscación de sus sistemas, en marzo este hacker dio una entrevista para el medio The Record, donde afirmó que LockBit seguía operando, previsiblemente con un nuevo software que habrán diseñado y bajo un nuevo nombre y muy posiblemente nuevos miembros.