Tecnología

China quiere acabar con los chips de Intel y AMD y eliminar Windows de los ordenadores de sus funcionarios

  • Pekín da otro paso en su estrategia de reemplazar la tecnología occidental
  • Ya prohibió los iPhone a funcionarios e intentó restringir los coches de Tesla
  • Represalias por las nuevas sanciones de EEUU a firmas tecnológicas chinas
Foto: iStock

China ha dado un paso más en su estrategia de sustituir la tecnología extranjera por soluciones nacionales. Buscando reducir su dependencia tecnológica de Occidente, especialmente de EEUU, las autoridades chinas han introducido nuevas directrices que supondrán la eliminación progresiva de los microprocesadores de las punteras compañías estadounidenses Intel y AMD de los ordenadores y servidores públicos. Las directrices más estrictas en materia de contratación pública también pretenden dejar de lado el sistema operativo Windows de Microsoft y el software de bases de datos de fabricación extranjera en favor de opciones nacionales en los ordenadores de los trabajadores de las empresas estatales.

Estas medidas avanzadas por el Financial Times representan el paso más significativo dado por China para crear sustitutos nacionales de la tecnología extranjera y se hacen eco de las medidas adoptadas en EEUU medida que aumentan las tensiones entre ambos países. Washington ha impuesto sanciones a un número creciente de empresas chinas por motivos de seguridad nacional, ha legislado para fomentar la producción de más tecnología en suelo propio y ha bloqueado las exportaciones de chips avanzados y herramientas afines a China.

Ya en septiembre trascendió que el régimen de Xi Jinping prohibía a los funcionarios públicos hacer uso del iPhone, el teléfono de Apple, en el ámbito profesional. Una medida que se impulsó en tres ministerios y que supuso un duro varapalo para Apple en bolsa. En ese momento todo apuntaba a una contraofensiva de Pekín en respuesta a las restricciones impuestas desde Washington a los teléfonos Huawei y a la red social TikTok.

El presidente chino ya pidió entonces que las oficinas del estado invirtieran más en compras de ordenadores y sistemas operativos fabricados por empresas locales. En 2021, Pekín ya impuso restricciones al uso de vehículos Tesla, también estadounidense, alegando razones de seguridad nacional como el riesgo de espionaje. Los coches de Tesla introducen un software que recopila una gran cantidad de datos de quienes lo utilizan. Por ejemplo, cuentan con una gran multitud de cámaras controlan el perímetro del vehículo. Sin embargo, el buró comunista no consiguió su objetivo, ya que las ventas continuaron a buen ritmo.

Según informa el diario británico, este año, los funcionarios chinos han empezado a seguir las nuevas directrices sobre ordenadores personales, portátiles y servidores que el Ministerio de Economía y el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información (MIIT) dieron a conocer el 26 de diciembre. En ellas se ordena a los organismos públicos y órganos de los partidos por encima del nivel municipal que incluyan criterios que exijan procesadores y sistemas operativos "seguros y fiables" a la hora de realizar sus compras.

El mismo día de diciembre, la agencia estatal de pruebas, China Information Technology Security Evaluation Center, publicó su primera lista de procesadores y sistemas operativos "seguros y fiables", todos de empresas chinas. Entre los 18 procesadores aprobados había chips de Huawei y del grupo Phytium, respaldado por el Estado. Ambos figuran en la 'lista negra' de exportaciones de Washington. Los fabricantes chinos de procesadores utilizan una mezcla de arquitecturas de chips que incluyen la familia x86 de Intel, Arm y otras de fabricación propia, mientras que los sistemas operativos se derivan del software Linux de código abierto.

La renovación de las adquisiciones de Pekín forma parte de una estrategia nacional de autarquía tecnológica en los sectores militar, gubernamental y estatal que se ha dado en llamar xinchuang o "innovación en aplicaciones informáticas". Las normas "son las primeras instrucciones detalladas y claras a escala nacional para el fomento del xinchuang", declaró un funcionario de la administración local que gestiona la sustitución de sistemas informáticos. La Comisión de Supervisión y Administración de Activos Estatales también ha pedido a las empresas estatales que completen la transición tecnológica a proveedores nacionales antes de 2027.

Cuantificando el golpe a Intel y AMD

Este endurecimiento de los criterios de Pekín hará daño a las empresas estadounidenses en China, empezando por las propias Intel y AMD. China fue el mayor mercado de Intel el año pasado, aportando el 27% de sus 54.000 millones de dólares en ventas, y el 15% de los 23.000 millones de dólares de AMD. Microsoft no desglosa sus ventas en China, pero su presidente, Brad Smith, declaró el año pasado ante el Congreso de EEUU que el país le aportaba el 1,5% de sus ingresos, recuerda el FT.

Los expertos creen que Intel y AMD tendrán difícil estar en la lista de firmas aprobadas por Pekín. Para 'pasar el corte', las empresas deben presentar la documentación completa de I+D y el código de sus productos. El principal criterio de evaluación es el nivel de diseño, desarrollo y producción realizados en China, según un comunicado de la agencia estatal de pruebas.

En los últimos meses, los ministerios de finanzas provinciales y municipales han publicado docenas de avisos sobre las nuevas directrices, tratando de garantizar el cumplimiento entre miles de compradores. Dos funcionarios de adquisiciones que han hablado con el Financial Times admiten que aún quedaba cierto margen para comprar computadoras con procesadores extranjeros y sistema Windows. Pero los criterios se han endurecido notablemente.

Uno de los funcionarios, con sede en Shenzhen, ha revelado que ahora necesitaban dar un paso adicional para registrar y explicar las compras de procesadores extranjeros. La oficina de compras del gobierno central también dijo este mes que podrían continuar compras limitadas de computadoras con tecnología Intel y AMD, siempre que los departamentos "cumplan con los procedimientos de gestión pertinentes".

Lin Qingyuan, experto en chips del grupo de investigación Bernstein, ha dicho que la sustitución progresaría más rápido para los procesadores de servidores que para los de ordenadores, debido al ecosistema de software más limitado que necesita ser reemplazado. Los analistas de Zheshang Securities estiman que el país necesitará invertir 660 mil millones de yuanes (91.000 millones de dólares) entre 2023 y 2027 para reemplazar la infraestructura de tecnología de la información (TI) en el gobierno, los órganos del partido y ocho industrias importantes.

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