
La forma en las que los usuarios nos entretenemos ha cambiado mucho en los últimos 15 años, ahora son ellos los que eligen qué ver y cuándo, y no se rigen por la programación de la televisión. Esto es posible gracias a la llegada de las plataformas de series y películas en streaming, donde prácticamente todos los hogares cuentan con al menos una suscripción a Netflix, Amazon Prime, Disney+ o HBO Max.
Esto no solo ha llamado la atención de los anunciantes, que poco a poco se cuelan en este tipo de servicios, sino que se ha convertido en el disfraz perfecto para que los ciberdelincuentes lleven a cabo sus estafas sulpantando a estas compañías.
Y el hecho de que tantos usuarios tienen algún perfil registrado en estos servicios, hace que este tipo de timo y engaño se haya convertido en uno de los más populares de los últimos años, según aseguran desde la Organización de Consumidores y Usuarios.
Al parecer ha habido un importante auge en ciberataques del tipo smishing (vía SMS), donde los cibercriminales se hacen pasar por alguna de estas plataformas con el objetivo de obtener las credenciales de acceso o datos personales y bancarios de la víctima.
Cómo funciona la estafa
La mejor manera de evitar ser estafado es conociendo el 'modus operandi' del engaño. Por norma general, la víctima recibe un mensaje en la que le alertan de que su suscripción en la plataforma se ha caducado o está a punto de caducar.
Y que para renovarla, el usuario debe de dar su información, y como señalan desde la OCU para incitar a que la víctima lo haga lo antes posible, muchas veces ofertan meses gratis o promociones similares. Además que para hacerlo todavía más real, en el mensaje se incluyen logos, fotos o cualquier elemento que ayude a relacionar el mensaje con la compañía legítima.
Cómo evitarla
Como con cualqueir otra estafa de este tipo, hay una serie de pasos a seguir para evitar caer en el timo, ya que este depende plenamente de que la víctima entregue la información al delincuente. En primer lugar, siempre debes desconfiar de todo mensaje que llega de la nada y te incite a entrar en una web, abrir un enlace o descargar un archivo.
A su vez, nunca respondas a este tipo de comunicaciones y muchos menos facilites tu información personal o bancaria. Y en el caso de que no estés seguro de la legitimidad del mensaje, ponte en contacto con la compañía a la que dicen pertenecer desde otra vía de comunicación para asegurarte de que es cierto.