
La Asociación de Usuarios Financieros (ASUFIN) ha denunciado ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) que Google está infringiendo de manera deliberada los requisitos del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), una normativa europea que protege a los usuarios frente a los usos que pueden hacer las compañías de sus datos personales.
Google es una de las empresas más grandes del mundo, y en concreto su servicio de correo electrónico, Gmail, es usado por prácticamente cualquier usuario que tenga conexión a Internet. Por eso, es muy importante que esta plataforma cumpla con la normativa que se encarga de la protección de datos de las personas.
Pero tal y como denuncia ASUFIN, Google no está cumpliendo con ello, y está aprovechando su posición predominante en el mercado, para cometer infracciones (según considera este organismo) con el proceso de proporcionar consentimiento para el tratamiento de los datos personales de estas personas al abrir una cuenta en Gmail.
"Instamos al organismo español que vela por el cumplimiento de esta normativa a que tome en consideración los hechos y que se imponga, en su caso las multas proporcionadas y efectivas, teniendo en cuenta los consumidores potencialmente afectados, que son todos los usuarios de cuentas de correo de Google "se puede leer en el comunicado.
Esto es porque el reglamento europeo en el que se basa esta denuncia insta que el procedimiento que ofrecen estos servicios, aparte de ser el más fácil y rápido, tiene que ofrecer la "mayor protección de los datos facilitados por el usuario, el tratamiento menos invasivo y la menor retención temporal de datos". Cosa que Google no cumple.
Al crearse una cuenta de Gmail, los usuarios tienen que consentir de manera casi ilimitada el tratamiento de toda su información personal con la que luego Google crea perfiles publicitarios para que te lleguen anuncios y recomendaciones específicas.
El problema está en que no hay una manera directa de negar este consentimiento, y hacerlo es un proceso lento y plagado de lenguaje difícil de comprender y con información incompleta que hace que en muchas ocasiones los usuarios se den por vencido y den permiso para el tratamiento de datos, cuando en realidad preferirían poner límites.
ASUFIN termina su denuncia diciendo que "El procedimiento no es transparente y supone un tratamiento excesivo para los fines que persigue el usuario: abrir y manejar una mera cuenta de correo." Veremos en qué acaba este proceso.