
Parece que a Elon Musk no le gustan demasiado las críticas. Es lo que han podido comprobar al menos 5 empleados de SpaceX que redactaron y distribuyeron una carta en la que reprocharon al multimillonario su comportamiento, al tiempo que animaban a los ejecutivos de la empresa a hacerla más inclusiva. La respuesta de Musk no ha hecho esperar: los ha despedido.
En el documento en cuestión, titulado Una carta abierta a los ejecutivos de SpaceX, los ahora ex empleados definieron a Musk como una "distracción y vergüenza" para la compañía. Además, incluyeron tres demandas en las que pedían que: SpaceX se separe "rápida y explícitamente de la marca personal de su fundador", se iguale la responsabilidad de todos los ejecutivos para convertir la empresa en "un gran lugar de trabajo" y, por último, se defina y responda "uniformemente" ante cualquier comportamiento inaceptable.
SpaceX comunicó esta decisión al resto de empleados a través de un correo electrónico firmado por la presidenta de la compañía, Gwynne Shotwell. En dicho mensaje, señaló que se había llevado a cabo una investigación interna y SpaceX había despedido a varios empleados relacionados con la carta. Según Shotwell, la carta había hecho que el resto de trabajadores "se sintieran incómodos, intimidados y acosados, y/o enfadados" porque "les presionaba para que firmaran algo que no reflejaba sus opiniones", según publicó The New York Times.
Los trabajadores de Tesla tampoco están muy contentos con su CEO. Musk es conocido por su nivel de exigencia y el número de horas que espera que trabajen sus empleados de todo el mundo. Recientemente, les pidió a los ejecutivos de la compañía que volvieran a trabajar a la oficina durante "un mínimo (y quiero decir mínimo) de 40 horas a la semana", es decir, "menos de lo que pedimos a los trabajadores de la fábrica". Aquellos que no cumplan estos requisitos, deben "dejar Tesla".
Musk, acusado de estafa piramidal con dogecoin
Por si todo esto fuera poco, Musk acaba de ser demandado por supuestamente haber dirigido una estafa piramidal basada en dogecoin. El demandante, un estadounidense llamado Keith Johnson, alega que los comentarios del CEO de Tesla sobre esta criptomoneda hicieron que su valor subiera y le llevaron a ser "defraudado en dinero".
Según los abogados del demandante, Musk empezó a promocionar dogecoin con el único objetivo de hacer crecer su cotización cuando, en realidad, la criptomoneda "no tiene ningún valor". Para apoyar su caso, han incorporado al documento judicial citas de los multimillonarios Bill Gates y Warren Buffett, en las que cuestionan el valor de estos activos digitales.
Por esto, el demandante pide una indemnización por valor de 258.000 millones de dólares por daños y perjuicios. Además, quiere que Musk, Tesla y SpaceX tengan prohibido promocionar dogecoin en el futuro.