
Asus apuesta por la creación de contenido y los profesionales con un portátil único en el mercado, gracias a su hardware y a la introducción de una rueda muy especial.
¿Qué debería tener un portátil para ser considerado "para creadores"? Es una pregunta que tal vez te hayas hecho al ver modelos que son publicitados como tales, y que no tiene fácil respuesta.
¿Hardware potente? Eso lo quiere todo el mundo, da igual que sea creador. ¿Una buena pantalla? Ídem. Y así con todo. Al final, modelos como el Asus Vivobook Pro 14 que pudimos probar el año pasado destacan por aunar todas esas características en un conjunto equilibrado y muy capaz. Pero si eso no es suficiente, el fabricante ofrece algo más… adaptado a las necesidades especiales de los creadores.
Una rueda mágica
El Asus ProArt Studiobook 16 representa la opción más completa y avanzada de Asus para diseñadores profesionales, productores de vídeo y, en general, usuarios creativos. En todos los aspectos, este portátil está diseñado sólo para ser más útil a este tipo de personas, y por eso encontramos elementos que no solemos ver en modelos más 'genéricos'. Como por ejemplo, la rueda.

Asus sorprendió a todo el mundo el pasado septiembre cuando mostró el Asus Dial, una rueda implementada directamente en el portátil, justo debajo del teclado, que nos ofrece un control adicional sobre las apps que usamos. Hay varias implementaciones (incluida una virtual en el Vivobook Pro), pero la del ProArt Studiobook es la más completa: es una rueda física que podemos rotar y pulsar, y cuyas funciones cambian dependiendo del contexto.
Por ejemplo, si estamos en el escritorio, al pulsar la rueda tenemos acceso rápido a funciones básicas, como el brillo de la pantalla o el volumen, que nos pueden resultar relativamente útiles. Pero si abrimos Adobe Photoshop, por ejemplo, comprobaremos que las opciones han cambiado: ahora tenemos acceso a opciones como cambiar el pincel, incluyendo el tamaño, la dureza , o la opacidad. También podemos rotar la rueda para alejar o acercar la capa en la que estamos trabajando, o acceder rápidamente al historial y volver a una versión anterior de la imagen en la que estamos trabajando.

Sólo tienes que pulsar la rueda en cualquier sitio, y aparecerá un menú circular; gira la rueda, y pasarás por cada opción, incluyendo submenús. Suena extraño, pero es increíblemente intuitivo, y en apenas unos minutos accederás inmediatamente a todas sus funciones, como si llevases toda la vida usándola. La pulsación y la rotación de la rueda ofrecen una sensación táctil instantánea, que nos permite pasar por los menús rápidamente y sin mirar una vez que los hayamos aprendido. Para profesionales que se tiran horas en proyectos, preveo que será muy rápido adaptarse, y las ventajas son evidentes, al tener acceso rápido a herramientas o funciones de nuestras apps más usadas.
Que la rueda cambie dependiendo del contexto es el mejor aspecto del Asus Dial, ya que así podemos tenerla configurada para cada app por separado, con diferentes accesos y funciones, sin tener que reprogramarla ni usar una combinación de teclas cada vez que cambiamos de app. La rueda se adapta por nosotros, y siempre nos ofrece lo que necesitamos.
Eso no es una exageración, ya que la rueda es personalizable usando el programa ProArt Creator Hub preinstalado en el portátil. Tenemos acceso a varias preconfiguraciones en programas como Photoshop, After Effects y Premiere Pro, gracias a la colaboración de Adobe; aunque es verdad que se echa en falta la compatibilidad con más aplicaciones usadas por creadores. Para compensar, podemos hacer que la rueda sea detectada por Windows como un dispositivo con rueda normal y corriente, y usar la configuración de cada programa para personalizar su uso. Como aspecto negativo, tengo que decir que en mis pruebas a veces el programa ProArt Creator Hub no era capaz de detectar correctamente la rueda, pero hasta ahora se ha arreglado con un reinicio.
Por último, podemos simplemente deshabilitar la rueda si nos molesta, aunque tengo que decir que en mis pruebas no he notado que sea un problema usar el teclado; eso es porque la rueda no sobresale del chasis del teclado, y no basta con poner la mano encima para presionarla. Aún así, es una opción que se agradece.

Pero ya que hablamos del teclado, tengo que mencionar que es uno de los mejores que he probado hasta ahora en un portátil. Para empezar, la sensación táctil es muy buena, muy cercana a la de un teclado convencional, y es fácil escribir rápidamente y sin fallos. También hay que destacar que las teclas direccionales tienen una textura diferente al resto, por lo que son fáciles de encontrar por el tacto.
Además, al ser un portátil relativamente grande, Asus ha podido incluir un teclado completo con teclado numérico, algo que por fin no echaremos de menos. Tal vez me hubiera gustado un trackpad más grande; pero al menos Asus ha metido tres botones independientes que nos facilitarán enormemente hacer clicks sin tener que presionar el trackpad como es habitual.
Una pantalla increíble
El otro aspecto por el que el Asus ProArt Studiobook 16 destaca es la pantalla: se trata del primer portátil del mundo en usar una pantalla de 16 pulgadas con resolución 4K, tecnología OLED y HDR. En persona, es tan buena como esas palabras indican, con un brillo genial, una nitidez excepcional y un gran tratamiento de colores: cubre el 100% de la gama de colores DCI-P3, y no sólo está calibrada de fábrica, sino que con ProArt Creator Hub podemos calibrarla para nuestras necesidades.
Es una de las mejores pantallas, posiblemente la mejor, que he visto no sólo para creación de contenido, sino para disfrutar de contenido multimedia gracias al gran contraste que permite reproducir vídeos HDR de alta calidad. La resolución 4K es 3840 x 2400 píxeles, y eso supone que es un poco más alta de lo habitual, así que tenemos más espacio para menús y herramientas.

El único aspecto negativo está en los bordes, que son más gruesos de lo que podríamos esperar en un portátil tan avanzado como este, pero que están plenamente justificados con la calidad de este panel. Además, hay que tener en cuenta que en el borde superior tenemos una webcam, con cubierta integrada para mayor privacidad y compatible con Windows Hello para iniciar sesión sólo con nuestra cara.
Si por alguna razón no queremos usar la pantalla del portátil, o nos viene pequeña, podemos conectar un monitor profesional gracias al puerto HDMI 2.1, que soporta vídeo 8K de hasta 120 Hz, algo que se agradece enormemente en un mercado al que le cuesta abandonar HDMI 2.0. Como también se agradece la presencia de una ranura SD de tamaño completo (nada de sacar la tarjeta microSD de la cámara), y además usa el estándar SD Express 7.0 para velocidades de hasta 985 MB/s. La selección de puertos se completa con dos USB 3.2 Gen 2 Type-C, y otros dos USB 3.2 Gen 2 de Type-A; los primeros también sirven para conectar el portátil a la red, pero sólo para una emergencia porque no son capaces de aportar la energía necesaria. Este portátil viene con un auténtico 'ladrillo', un adaptador de 240 W que es el que podrá aportar todo el 'jugo' necesario.

Y es que no podemos olvidar que el ProArt Studio viene con hardware puntero, para no dejarnos tirados en ninguna tarea por exigente que sea. Es posible montar hasta un Ryzen 9 5900HX, uno de los procesadores para portátil más potentes del mercado y una auténtica 'bestia'. Para la gráfica, podemos elegir hasta una GeForce RTX 3070, y este portátil forma parte de la gama RTX Studio de Nvidia, que garantiza unos drivers apropiados para obtener todo el provecho de la gráfica en programas como Lightroom, Autodesk Anrold, y motores gráficos como Unreal Engine y Unity.
Todo ello, con un diseño austero pero que, personalmente, considero muy atractivo, con un color negro muy elegante en el que sólo destaca la marca ProArt (y no Asus).
La nueva referencia
El Asus ProArt Studiobook 16 se ha convertido en la nueva referencia para creadores profesionales y entusiastas, que realmente no se puedan conformar con cualquier cosa. No es sólo un portátil muy completo y bien equipado, sino que tiene funciones que no hemos visto en ningún otro modelo, como la rueda Asus Dial.
Como aspectos negativos, sólo puedo poner un peso algo excesivo, una portabilidad algo pobre (tanto por batería como por el adaptador), y algunos fallos en el software relacionados con la rueda.
El Asus ProArt Studiobook 16 es difícil de encontrar, pese a precios que superan los 2.500 euros, así que es evidente que ha conseguido hacerse un sitio en el mercado profesional.