El nuevo FireCuda Gaming SSD de Seagate es una opción más para almacenar y ejecutar juegos para nuestro ordenador, con una función que lo hace mucho más rápido que el resto, si la podemos usar.
Ahora que los videojuegos se han asentado en las 4K, los requisitos de almacenamiento han cambiado mucho; son programas que ocupan cada vez más espacio, y especialmente, que requieren de altas transferencias de datos para ejecutarse correctamente.
Si tu ordenador gaming tiene problemas para cargar texturas, o los tiempos de carga son demasiado largos, puede que tengas un 'cuello de botella' en el almacenamiento. Claro, que eso supone que tendrás que cambiar el SSD interno, o bien, optar por una solución más sencilla e igual de rápida, un SSD basado en tecnología NVMe, que usa el mismo bus de datos que las tarjetas PCIe para obtener velocidades absurdas.
Un 'ladrillo' con RGB
Pero antes que eso, el diseño es la parte que más sorprende al principio con el FireCuda Gaming SSD. No puedo sino definirlo como un 'ladrillo', un rectángulo negro de esquinas puntiagudas que pueden doler mucho si se te cae en un pie. Además, pesa bastante (100 gramos) para su reducido tamaño, por lo que da la sensación de ser muy denso.

Los dos únicos elementos de diseño que vemos son el logotipo de Seagate, y la línea en el extremo; ahí es donde tenemos la iluminación RGB, como es obligatoria en un dispositivo gaming. Podemos configurarla con el programa Toolkit de Seagate (que debemos descargar, ya que no viene guardado en la unidad), con diferentes efectos y colores; lo mejor es que es compatible con Razer Chroma, así que si usamos el programa Synapse, podemos hacer que se sincronice con nuestros ratones Razer u otros dispositivos, todo un detallazo.
Sólo necesitamos un cable, el USB-C que viene incluido en la caja para conectarlo con nuestro ordenador; no tenemos adaptador a USB-A, y la verdad es que no es recomendable usar uno, ya que realmente querrás conectar este SSD al puerto más rápido que tenga tu ordenador. Créeme, lo va a aprovechar.
Veloz, si puedes soportarlo
El FireCuda Gaming SSD es uno de estos modelos, uno de los más rápidos que he podido probar; de hecho, es tan rápido que es posible que tu ordenador no pueda soportarlo completamente.
Empecemos por el principio. El FireCuda aloja un pequeño SSD, basado en memoria NAND y con una conexión NVMe aprovechada por un puerto USB 3.2 Gen 2x2; esta última parte es la importante, ya que es la que permite que este SSD alcance velocidades de transferencia de 2.000 MB/s.
Todo el mundo conoce USB 3.1, que es capaz de alcanzar velocidades de 1.000 MB/s, y puede que algunos conozcan USB 3.2. La versión que usa este SSD es Gen 2x2, también conocido como SuperSpeed USB 20 Gbps, y el nombre lo dice todo: gracias a una mayor velocidad por carril y a un sistema más avanzado de codificación, este estándar es capaz de sacar todo el partido a la memoria del SSD.
Eso se traduce en transferencias rapidísimas y tiempos de carga instantáneos; este es uno de los SSD más rápidos del mercado, sin duda alguna, pero es difícil aprovecharlo.
El problema está en el estándar USB 3.2 Gen 2x2, que llegó en un momento un poco complicado, justo en medio de USB 3.1 y el anuncio de USB4, la nueva versión que también permite obtener velocidades de 20 Gbps en una de sus versiones.
Aquí es donde empieza el lío: que un ordenador tenga USB4 no significa que pueda soportar USB 3.2 Gen 2x2; la especificación de USB4 afirma que el soporte de USB 3.2 de 20 Gbps es opcional, y no obligatoria. Así que la mayoría de nuevos ordenadores con Thunderbolt 4 y USB4 no son capaces de realmente aprovechar este SSD.

Es algo que he aprendido por las malas a la hora de probar este SSD. Aunque lo he usado con varios portátiles gaming con Thunderbolt 4 y USB4, ninguno ha sido capaz de aprovecharlo al máximo, llegando a un tope aproximado de 1.000 MB/s; en concreto, CrystalMark ha obtenido 1.078 MB/s de lectura secuencial, y 1.052 MB/s de escritura secuencial, de media en varias pruebas consecutivas. Eso es muy rápido, lo suficiente como para que se nos olvide todo el lío de los USB.
Me ha sorprendido más el rendimiento real de este SSD. Las pruebas de lectura y escritura aleatoria fueron muy buenas, de 300 MB/s en ambos casos de media, y eso se traduce en unas tasas de transferencia excelentes cuando copiamos muchos archivos; como por ejemplo, cuando cargamos juegos instalados en el SSD. Sí, en vez de usar esta unidad externa para almacenar los juegos, recomiendo instalarlos directamente ahí para disfrutar de la máxima velocidad posible. Y cuando copiamos archivos grandes, se rondan los 700 MB/s.
Rápido, incluso cuando está 'capado'
Puede parecer algo decepcionante comprar este SSD y no poder aprovechar la velocidad que ofrece USB 3.2 Gen 2x2, pero al revés, yo diría que puede ser una buena inversión para el futuro. Si no tienes un portátil que lo soporte, podrás aprovecharlo mejor cuando el estándar esté mejor adoptado por los fabricantes.
Incluso con ordenadores con conexiones USB4 o USB 3.1, el rendimiento es muy bueno; de hecho, es mucho mejor que con otros SSD diseñados para esos puertos, ya que tiene más margen de mejora. Es algo que notamos con el rendimiento real, con transferencias de muchos archivos y la carga de videojuegos.
El Seagate FireCuda Gaming SSD es un gran dispositivo gaming de almacenamiento, pero te costará. La versión de 500 GB cuesta 134,99 euros, la de 1 TB, 214,99 euros y la de 2 TB, nada menos que 359,99 euros. Ya está disponible en tiendas en España.