Como parte de un acuerdo extrajudicial, Apple se ha comprometido a implementar cambios en la App Store para ayudar a los desarrolladores.
Como buen 'jardín vallado' que es, la App Store tiene serias limitaciones para los desarrolladores y usuarios. Apple debe aprobar cada app por separado, y tiene una serie de reglas, algunas aparentemente arbitrarias, para decidir qué entra y qué sale. Una de esas reglas se refiere a los pagos: todos los que estén integrados en las apps deben ser realizados a través de la plataforma de Apple. De esta manera, la compañía se lleva un porcentaje de cada compra: 30% en general, y 15% si el creador ingresa menos de 1 millón de dólares al año.
Es obvio el motivo por el que existe esta regla, para generar ingresos para Apple, y algunos no están de acuerdo; así nació la polémica de Fortnite, que intentó saltarse la App Store añadiendo otros métodos para comprar su moneda virtual y fue expulsada casi instantáneamente. Apple fue demandada por eso, pero ese no fue el único problema judicial que tenía; ya en el 2019 sufrió una demanda colectiva de pequeños desarrolladores estadounidenses.
Hoy, ese proceso ha llegado a un acuerdo extrajudicial, por el que Apple se compromete a realizar cambios en su plataforma. El más llamativo es que permitirá a los desarrolladores contactar con los usuarios y ofrecerles métodos para saltarse la App Store para hacer pagos, pero la 'letra pequeña' es importante.
Para empezar, los desarrolladores sólo podrán avisar a los usuarios de que pueden pagar de otra manera usando correo electrónico, y en ningún caso con notificaciones o avisos en la propia app; además, los usuarios tendrán que apuntarse voluntariamente a esos correos introduciendo su dirección, y tendrán una manera de desactivar los avisos.
El correo podrá incluir otras maneras de pagar por bienes dentro de la app, como monedas virtuales o suscripciones, usando otras plataformas de pago, como PayPal, Google Pay, Stripe o un proveedor de pagos que use tarjeta de crédito, por ejemplo.
Apple también se ha comprometido a mantener una búsqueda en la App Store que sea justa y basada en parámetros relevantes (evitando la modificación de la búsqueda como habría hecho en el pasado), además de aportar 100 millones de dólares a un fondo para desarrolladores pequeños.
Un 'rodeo' para evitar a Apple
Aunque la idea de poder pagar de otra manera suena revolucionaria, en realidad las primeras reacciones de la comunidad de desarrolladores no son positivas. Lo único que ha conseguido el acuerdo es que los desarrolladores puedan contactar con sus clientes por métodos alternativos que no sean notificaciones, algo que podríamos pensar que ya era posible, pero que Apple prohibía en sus términos de uso. No es tanto 'saltarse la App Store', sino dar un gran rodeo que la inmensa mayoría de usuarios no conocerá, porque no habrá introducido su correo electrónico.
Por lo tanto, en estos momentos es realmente dudoso que este cambio afecte significativamente a los ingresos de los desarrolladores, aunque este no es el final de la historia. Apple aún tiene pendiente su juicio con Epic Games, y está siendo objetivo de nuevas leyes en Estados Unidos y Europa que pueden obligar a crear una App Store más abierta.