
El anuncio de Windows 11 parece ya inevitable, una revisión completa del sistema operativo que llegará con importantes novedades, tanto funcionales como de diseño. Pero un error de Microsoft ahora puede haber revelado que tendrá algo que muchos usuarios llevan tiempo pidiendo: compatibilidad con Android.
Apple ha vuelto a convertirse en una amenaza para Microsoft en la hegemonía del mercado de los ordenadores, gracias a sus nuevos procesadores M1 y especialmente, a la gran compatibilidad entre todos sus sistemas. Ya es posible ejecutar apps de iOS en los MacBook, y en el WWDC, Apple presentó una función sorprendente: controlar varios dispositivos iOS y macOS con el mismo conjunto de teclado y ratón.
Esta interconectividad es algo con lo que Microsoft soñaba en su día, cuando lanzó Windows Phone. Pero ahora que ha aceptado que ese camino se terminó, puede que su mejor opción sea apoyar al gran rival de Apple. Ya se sabe, "el enemigo de mi enemigo es mi amigo".
Windows 11, la próxima versión del sistema operativo, podría ser capaz de ejecutar apps de Android, gracias a un emulador integrado; es algo que se viene rumoreando desde hace años, pero es ahora que tenemos la mejor prueba, gracias a MSPowerUser.
Un empleado de Microsoft, el ingeniero de software Hideyuki Nagase, ha publicado una actualización en el código del subsistema de Linux para Windows, que permite ejecutar programas diseñados para sistemas Linux como Ubuntu; entre los cambios, se incluyen un par de referencias a un "emulador de Android".
Internamente, Microsoft llama a esta función "Project Latte", y permitiría ejecutar apps de Android dentro de Windows; los desarrolladores sólo tendrían que cambiar el empaquetado de sus apps, de APK a MSIX.
Estas apps no se podrían descargar como cualquier programa de Windows, sino que tendrían que ser distribuidas obligatoriamente dentro de la Tienda de Microsoft que viene preinstalada en Windows. Una vez instalada la app, Windows usaría el emulador integrado para ejecutarla como si fuese un programa nativo a efectos prácticos.
Suena bien, pero este método tendría algunos inconvenientes. Para empezar, los usuarios dependen de que los desarrolladores de su app favorita hagan una versión para Windows y la publiquen en la Tienda de Microsoft, y es comprensible que muchos no quieran por muy sencillo que sea el proceso.
Pero especialmente, el gran problema es que Microsoft no podría ofrecer acceso a las apps de Google, como la Play Store; inmediatamente, eso deja fuera de juego a millones de apps que se basan en esas apps para funcionar correctamente. Es algo que saben muy bien en Huawei, que sufren las mismas limitaciones por el bloqueo impuesto por el gobierno estadounidense.
Por lo tanto, está por ver cómo de útil sería la posibilidad de ejecutar apps de Android en Windows.