
YouTube se ha retractado: hace semanas, notificó a los creadores que cualquier vídeo que hablara sobre el COVID-19, se enfrentaría a la desmonetización automática. El virus fue declarado un tema delicado, definido como un evento reciente que conlleva "una pérdida de vidas". YouTube consideraba que estos vídeos no eran adecuados para incorporarles publicidad, si bien sí se les permitía permanecer en la plataforma porque no violan ninguna pauta de contenido.
Ahora, YouTube se echa para atrás a través de una carta que la directora ejecutiva de YouTube, Susan Wojcicki, mandó a los creadores, explicándoles que podrían volver a monetizar sus vídeos hablando sobre el virus. El comentarista y youtuber estadounidense, Philip DeFranco era una de las personas que ha cubierto el brote en curso y ha sido uno de los que ha mantenido la polémica con YouTube, quien se mantuvo en sus quince y le dijo que entraban dentro de la política de temas sensibles.
YouTube comenzará a monetizar primero los vídeos de aquellos creadores que "informan con precisión y cuyo contenido cumpla con las pautas amigables para los anunciantes" (si bien no ha especificado como determinará que la información es "precisa"). La compañía expandirá posteriormente la monetización al resto de creadores.
La carta de Wojcicki también abordó la difusión de información errónea sobre COVID-19 en YouTube, afirmando que la compañía está "trabajando duro" para combatir la propagación de videos dañinos. YouTube "continuará eliminando rápidamente los videos que violen nuestras políticas cuando se marcan, incluidos aquellos que desalientan a las personas a buscar tratamiento médico o afirman que las sustancias nocivas tienen beneficios para la salud".