
La fibra óptica está matando al ADSL a toda velocidad. La tendencia no tiene vuelta atrás: los españoles están cambiando la tecnología de sus conexiones a Internet en favor del denominado FTTH (fibra óptica hasta el hogar). La culpa la tienen los principales operadores de telefonía, alineados en unas batallas comerciales que están democratizando el consumo de fibra en todas aquellas zonas donde es posible.
Según los expertos consultados por este periódico, son cinco los elementos que provocan este relevo tecnológico, capaz de situar a España entre los líderes mundiales en FTTH: la fuerza de las ofertas convergentes que equiparan precios del ADSL con los de la fibra; el tirón de la televisión de pago sobre fibra; las mayores prestaciones de velocidad y latencia de la fibra respecto al ADSL; el despliegue masivo de las redes ultra de velocidad en los hogares; y el cierre progresivo de las centrales de ADSL.
Según se desprende de los datos que ayer compartió la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), la fibra óptica captó el pasado mes de julio en España un total de 110.219 líneas de FTTH, periodo en el que las conexiones de DSL disminuyeron en 101.219 líneas, mientras que los abonados al cable (HFC) se redujeron en poco más de 8.000 líneas. En el conjunto de los doce últimos meses, la fibra óptica aumentó su presencia en 1,8 millones de líneas, mientras que el DSL las redujo en 1,5 millones.
En concreto, el FTTH superó en julio los 4,1 millones de conexiones. El 65,7% del total de las líneas de FTTH correspondió a Movistar, cuyo parque se situó en 2,7 millones de líneas al cierre del pasado julio. Según explicó ayer la CNMC, durante el pasado julio, el parque de banda ancha fija en España aumentó en 1.661 líneas, hasta un total de 13,38 millones de conexiones, con una penetración de 28,8 líneas por cada 100 habitantes, frente a las 27,7 por cada 100 personas de hace un año.