Asus ha subido la apuesta. Aunque la compañía con sede en Taipéi viene desde hace años destacando en la fabricación de portátiles, a finales del año pasado presentó una auténtica joya con la que competir con los ultraligeros más avanzados de la clase.
El Asus ZenBook 3 logra combinar con acierto potencia y diseño. Equipa un Intel Core i7 a 3,5 Ghz y 16 GB de RAM en 11,9 milímetros de grosor, 910 gramos y un tamaño casi parejo al de un folio. Esta mezcla de prestaciones da como resultado que se haga tremendamente cómodo llevar a cualquier parte, al tiempo que asegura un alto rendimiento en todo momento.
Estamos ante un equipo que no está pensado para un consumidor medio, así lo determinan sus casi 1.600 euros y sus terminaciones premium que lo convierten en una de las joyas del mercado de ultrabooks. El ZenBook monta un chasis de una sola pieza de aluminio aeroespacial con el acabado concéntrico característico de la línea de productos. La apuesta por este material le hacen robusto y ligero, pero su diseño elegante le hacen llamar la atención en cualquier entorno.
Más allá de sus terminaciones, lo realmente interesante del dispositivo se encuentra en su interior. Donde Asus ha conseguido sacar músculo para multiplicar el rendimiento y las posibilidades en un equipo ultraligero.
El ZenBook 3 probado monta un Intel Core i7, 16 GB de RAM y un SSD de 512 GB, tres pilares en los que basar una experiencia de uso excelente en la que todo lo que se le pide al equipo responde al instante. La premisa de Asus al concebir el equipo parece clara: hacer todo fácil y cómodo.
Bajo el planteamiento de hacer la relación del usuario con el equipo lo más fluida posible, incorpora un lector de huellas en la parte superior del touchpad, con lo que iniciar sesión es tan cómodo como hacerlo en un smartphone. También se ha mejorado el touchpad, que además de haber sido reforzado para hacerlo más agradable al tacto, cuenta con un controlador que permite ser personalizado para realizar acciones propias. El teclado por su parte también es agradable y especialmente llamativo por su retroiluminación.
Pantalla, batería y conexiones
El Zenbook 3 cuenta con una pantalla de 12,5 pulgadas con un bisel de sólo 7,6 milímitros que hace que resalten las imágenes que se muestran en ella gracias a la relación de pantalla-cuerpo del 82%. Está calibrada para la gama de colores RGB y promete una gama de color del 72% en NTSC y la relación de contraste de 1000:1, que propociona colores vivos y realistas. Además Asus utiliza la tecnología Tru2life que optimiza el aspecto de los píxeles de cada fotograma para disparar la nitidez.
El equipo monta una batería de 40 Whrs Polímeros de 6 Celdas, mientras que la compañía asevera que la duración es de 9 horas, un uso normal del mismo nos descubrirá que el rendimiento diario es menor rondando las 7 u 8 horas, incluso, si se le da un uso intensivo.
La batería se carga a través de una conexión USB-C de carga rápida, ya que se puede tener el 60% de la capacidad en algo menos de una hora. Precisamente, para aligerar el peso, el equipo sólo tiene una conexión USB-C y una salida audiojack, una en cada lateral. Eso sí, el portátil incorpora un Dock con salidas de tarjetas SD, LAN, VGA, HDMI, USB 3.0 estándar y un puerto USB-C de carga.
Otra mejora que se puede encontrar en el equipo es la apuesta de Asus por el sonido. El Zenbook 3 posee cuatro altavoces: dos en la zona superior del teclado y dos en la parte inferior. Han sido desarrollados de la mano de Harman/Kardon para dar un buen rendimiento pese a tratarse de un ultrabook.
Conclusiones
En resumen, el Asus Zenbook 3 es el portátil perfecto para quién esté buscando un equipo rápido, resolutivo pero que por encima de todo priorice la movilidad. Sus 910 gramos hacen que sea perfecto para llevar a todos lados y tener un equipo potente en cualquier situación.
Eso sí, si lo que se está buscando es un portátil en el que lo principal sea la potencia y el usuario no va a tener que moverlo tanto, el precio puede suponer un problema ya que en esa horquilla se pueden encontrar equipos más potentes y con mejor rendimiento, eso sí, mucho menos ligeros.
