
El 'palo-selfie', ese sencillo artilugio para poder perfeccionar el popular arte del autorretrato moderno, comienza a ser vetado en determinados espacios.
Algunos de los principales museos del mundo ya prohíben acceder a su interior con él, ha relatado la cadena Ser. Es la decisión que han tomado, entre otros, el museo de los Uffizzi de Florencia, el madrileño Thyssen, el Metropolitan de Nueva York y el de Bellas Artes de Boston.
Los museos, que han pasado en los últimos años a ser atracciones turísticas, han querido poner coto a una moda que puede desvirtuar aún más el comportamiento entre sus muros, molestando a otros visitantes o incluso arriesgando la conservación de las obras.