El jerez forma parte del Foro de Denominaciones de Origen Vitivinícolas Históricas junto con el oporto, el rioja, el burdeos, el champaña, el coñac, el borgoña y el barolo. La Ruta del Vino y el Brandy del Marco fue la más visitada en España en 2018 con un total de 582.351 visitas, 241.871 extranjeros. Y el jerez Harveys es la única marca española en la lista de la compra de la reina de Inglaterra. Sin embargo, este vino parece que ha perdido fuelle en el terreno nacional, fruto de su esencia exportadora y algún error del pasado. La apuesta por la gastronomía y la alta gama es la estrategia de Jerez para superar el Brexit con el menor daño posible y recaptar al público nacional más allá de Andalucía.
César Saldaña, director del Consejo Regulador de Jerez, explica en una entrevista con Status que la mayor preocupación respecto al Brexit es la incertidumbre, el no saber lo que va a pasar. "Todos los operadores de la cadena están preocupados, incluso el propio consumidor inglés que comienza a estar retraído en sus compras". Lo cierto, los productores de la denominación de origen se juegan mucho: el pasado año, las exportaciones a Reino Unido supusieron el 28% de las ventas totales, con 8,4 millones de litros de vino exportados.
"Los vinos de Jerez se están enfocando a productos de gama alta, que generan más valor, y no tanto a productos de volumen masivo"
Sin embargo, Saldaña respira con cierta tranquilidad respecto a una hipotética subida de aranceles, ya sea por el Brexit o por la guerra comercial, porque desde el Consejo Regulador creen firmemente que su producto debe encaminarse al sector de alta gama y encauzarse en la revolución gastronómica que vive el mundo y España. "Los vinos de Jerez se están enfocando a productos de gama alta, que generan más valor, y no tanto a productos de volumen masivo". Un ejemplo claro de esta tendencia son mercados como el Norteamericano, donde el Jerez tiene sus propios bares y se utiliza como ingrediente de coctelería, el ruso o el asiático.

Este posicionamiento en el sector premium es el que va a permitir a las bodegas de Marco de Jerez, explica Saldaña, a disminuir los daños ante un posible Brexit pero también es el camino para recuperar la notoriedad perdida en el mercado nacional. Mientras otras denominaciones de origen como Ribeiro, Utiel-Requena o Rías Baixas han ganando terreno, subidos a la ola de la revolución gastronómica, frente al Rioja o Ribera del Duero, los vinos de Jerez se han quedado circunscritos al Marco y a los mercados internacionales.
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En conversaciones con diferentes bodegueros, asumen que los puntos oscuros de la historia del vino de Jerez en España han pesado mucho. Si a finales de los años setenta, la nueva cocina vasca liderada por Juan Mari Arzak sentaba las bases de la Nouvelle Cuisine española, a comienzos de los años ochenta, el vino de Jerez estaba enfocado en el volumen más que en la calidad. Una mala estrategia que desmereció la marca y que además se vio enturbiada por Ruiz-Mateos y el caso Rumasa.
Sin embargo, el tiempo lo cura todo, y desde el Consejo Regulador tienen claro que la apuesta por la gastronomía debe ser el futuro. Por ello, animan a probar las diferentes variedades de vinos de Jerez, aprender sobre los maridajes y desterrar dos mitos: los vinos de Jerez no solo sirven como aperitivo o para acompañar el postre y que estos vinos se beben en copa grande.
Fino
La cata: brillante color amarillo pajizo o dorado pálido. Aroma punzante y delicado, con nota de masa de pan y hierbas. Al paladar, es seco, fresco y delicado.
El maridaje: tapas, marisco, quesos suaves, sopas, pescado blanco, jamón o espárragos.
Degustación: 6-8 °C.
Alcohol: 15°.
Manzanilla
La cata: es muy similar al Fino. Sus carácter especial se lo da el clima de Sanlúcar de Barrameda, único lugar donde se da la crianza. Se diferencia del Fino en sus notas florales que recuerdan a la camomila
El maridaje: similar al Fino
Degustación: 6-8 °C.
Alcohol: 15°.
Amontillado
La cata: vino elegante de color topacio o ámbar.Aroma sutil y delicado, con notas de avellanas y tabaco negro. Entrada en boca amable y acidez equilibrada.
El maridaje: frutos secos, ahumados, pescado azul, alcachofas, queso curado y sopas.
Degustación: 12-14°C.
Alcohol: 16-22°.
Palo Cortado
La cata: conjuga la delicadeza aromática del amontillado con la corupulencia en paladar del oloroso. Color castaño caoba.Al paladar, resulta redondo, profundo y voluminoso.
El maridaje: queso curados, consomés y algunos guisos.
Degustación: 12 y 14°.
Alcohol: 17 y 22°.
Oloroso
La cata: color caoba. Aromas cálidos, con recuerdo a nuez, madera noble y notas tostadas. En boca, sabrosos, estructurados, redondos, mucho cuerpo.
El maridaje: frutos secos, quesos curados, embutidos, atún, caza y guisos de carne.
Degustación: 12 y 14°.
Alcohol: 17-22°.
Oloroso
La cata: color caoba. Aromas cálidos, con recuerdo a nuez, madera noble y notas tostadas. En boca, sabrosos, estructurados, redondos, mucho cuerpo.
El maridaje: frutos secos, quesos curados, embutidos, atún, caza y guisos de carne.
Degustación: 12 y 14°.
Alcohol: 17-22°.
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