Madrid 
La uva Godello ha sido la hermana pequeña de la albariño. Originaria de las laderas del río Sil, esta variedad estuvo a punto de desaparecer en el siglo XIX por culpa de la filoxera pero desde los años 80 del siglo pasado está ganando en importancia, dentro de esta tendencia por recuperar uvas autóctonas y por gran capacidad de envejecimiento en barrica de madera. Se puede encontrar en las Denominaciones de Origen como Valdeorras, Bierzo y Monterrei. Y destaca por producir blancos de gran calidad y potencial aromático.
Esto bien lo sabe Bodegas Emilio Moro que ha puesto el ojo en este tipo de uva para añadir un blanco de calidad a su gama de tintos de Ribera del Duero. "Hace cinco años yo no tomaba blancos; los tintos eran mi única pasión enológica hasta que probé la variedad Godello. Sus vinos me entusiasmaron porque son diferentes, llenos de frescura y profundidad aromática, con una complejidad y una capacidad de envejecimiento comparables a los tintos", explica José Moro, presidente de la bodega. Y razón que el empujó a embarcarse en un nuevo proyecto en la Denominación de Origen Bierzo.
La familia Moro se enamoró de esta región leonesa por su microclima especial. La barrera natural de la Sierra de los Ancares calma el ímpetu de las borrascas atlánticas y genera una climatología continental, con influencia oceánica, que resulta ideal para el cultivo de la vid.
Los primeros vivos de esta bodega se presentaron el año pasado, pero en esta nueva añada 2017, ha buscado sacar el máximo provecho a la heterogeneidad de paisajes, altitudes y orientaciones de El Bierzo y trasladar la esencia de cada parcela a los vinos en pos de hacerlos cada vez más complejos.
La Revelía 2017
Así, la Revelía 2017, que procede de los viñedos más altos de la bodega en El Bierzo –a unos 700 metros de altitud–, ha sido fermentado en barricas de 500 litros de robre francés con posterior reposo sobre lías durante 8 meses. A la vista ofrece un color amarillo pajizo, limpio y brillante. Los aromas son complejos y se ha huido de las notas tropicales en pos de reforzar la personalidad de la Godello, con recuerdos de flores secas, cítricos y una elegante mineralidad. En boca es amplio y balanceado, con el volumen justo para integrar la acidez con la facilidad de paso y una melosidad y ternura que envuelve el paladar dejando un postgusto largo y persistente. Precio: 21,95 euros.
El Zarzal 2017
El Zarzal 2017 es el otro de los vinos que proviene de los viñedos situados al inicio de las laderas, un terreno de suelos franco-arenosos y con un particular microclima, con exposiciones más umbrías en las que la fruta se mantiene fresca e íntegra. Fermentado en madera con posterior crianza sobre lías en fudres de roble francés de 2.500 litros durante 8 meses, El Zarzal 2017 presenta un color amarillo pajizo muy vivo. La nariz es fresca pero lo suficientemente madura para transmitir complejidad, destacando las flores blancas y las frutas de hueso con ligeros toques cítricos y notas tostadas. En boca, la acidez y la frescura propias de la Godello mantienen la viveza y el equilibrio del vino que, al mismo tiempo, resulta cálido por su volumen y melosidad. Precio: 12,10 euros.
