Cuatro directivos de Isolux Corsán, encabezados por el actual consejero delegado, Federico Ávila, y secundados con el apoyo financiero de un fondo de inversión estadounidense, comprarán el negocio de construcción de infraestructuras e instalaciones de la compañía en España. Le acompañan José Alberto Carrasco, director de Construcción, Andrés Álvarez, director de Activos, y Luis Manuel Corrales, director de Desarrollo de Negocio, según fuentes próximas al proceso.
La oferta, seleccionada por el administrador concursal Francisco Vera de entre las cinco recibidas, es la que garantiza la continuidad de un mayor número de trabajadores, por encima del centenar. Representa la quinta parte de la plantilla total. La empresa ya ha avanzado que presentará una expediente de regulación de empleo (ERE).
La propuesta, que deberá ser aprobada por el juez, incluye la marca Isolux Corsán. Con esta operación de managemet buy out (MBO) pretenden relanzar una nueva Isolux a partir del negocio de construcción en España, que abarca más de 140 proyectos de obra civil, infraestructuras e instalaciones.
Entre los contratos sobresalen las obras de construcción de varios tramos del AVE a Galicia, la ampliación del Hospital de Guadalajara, la presa de Almudévar, en Huesca, la estación depuradora de aguas residuales (Edar) de Nerja, en Málaga, la balsa de Vicario, en Tijarafe (Santa Cruz de Tenerife), la variante de Lucena, en Córdoba, el Puente de Huetor Tajar, en Granada, el Parque Tecnológico de Burgos, la conexión de depósitos de Almería y el mantenimiento de las comunicaciones y señalización del AVE Albacete-Alicante. Gran parte de los proyectos en cartera, no obstante, ya están terminados o a punto de hacerlo.
El resto de los negocios en España seguirán el proceso normal dentro del marco concursal en que se halla Isolux desde julio. Asimismo, la administración concursal continúa con las negociaciones para vender activos internacionales, como las redes eléctricas de Brasil.