Las conversaciones sobre su ubicación y con posibles socios está muy avanzada; ya se está seleccionando al personal.
Atersa, filial del Grupo Elecnor centrada en la fabricación de sistemas fotovoltaicos, está culminando las negociaciones con varios estados costeros de Brasil y con posibles socios locales, todos ellos industriales, para abrir una fábrica de paneles solares en el coloso sudamericano. Los viajes de la cúpula directiva son constantes -este domingo se marchan otra vez- y ya está en marcha la selección del personal, según comenta Virgilio Navarro, director general de la empresa.
La decisión de montar la factoría, que tendrá una capacidad de fabricación de 150 MW anuales, se produce como consecuencia de la normativa brasileña: el Banco Nacional de Desarrollo da facilidades financieras para las instalaciones de generación construidas con equipos manufacturados dentro de las fronteras del país, que son más altas cuanto más autóctonos sean sus componentes.
El Gobierno de Dilma Rousseff está lanzando rondas de subastas de centrales de producción fotovoltaica. La primera fue en octubre del año pasado y adjudicó 890 MW a un precio medio de 75 euros por MWh durante 20 años.